Aventura con una menor - Relatos Eróticos

Aventura con una menor

... era muy experimentada, la chupaba como un helado. Aun así, me excitaba muchísimo ver esa carita de nena chupándomela. Así estuvo unos 3 minutos hasta que no aguante más… no quería acabar ahí, asique la agarre del culo, la acosté en el sillón y comencé a bajarle los pantalones lentamente… su bombachita rosada con corazoncitos blancos, estaba toda húmeda, me acerqué y comencé a mordérsela por encima, mientras le acariciaba el clítoris. Martina: Dale… no me dejes asiiii, cojeme yaaa!! Julian: Espera pendeja… que tengo muchas ganas de chupar esa concha. Le baje su bombachita hasta la mitad, y ahí quedó al descubierto esa preciosura, tal como me la había imaginado. Una conchita chiquita, con poco exceso de carne jajaja, y con el famoso bigote nazi por encima, UNA PRECIOSURA. Sin dudarlo sumergí mi boca en ese manjar, emanaba el perfume de mujer, en una nena de apenas 15 años! Comencé lentamente… chupando todo lo que podía, mientras acariciaba su precioso clítoris con el dedo mayor. Note que ella empezaba a gemir, eso me volvía totalmente loco. Empecé a aumentar el ritmo, así también se incrementaron sus gemidos. Paré un momento y pregunté: Julian: Te gusta putita?? con la voz algo quebrada me responde: Martina: me encanta gordo, me encanta!! segui!! Cuando me dijo eso, me encendió aún más. Bajé de nuevo y empecé a chupársela con fuerza, mientras le metía 2 dedos en su conchita. Ella gemía como una loca, ya no le importaba nada, su conchita se humedecía cada vez más. Llego un ...

... punto que sus gemidos eran dignos de película porno. Luego de 1 minuto… su espalda se arqueo, sus piernas comenzaron a temblar. Ahí le metí un tercer dedo, la masturbaba y chupaba esa concha con furia. Comenzó a tener espasmos incontrolables, mientras gemía como una loca, estaba teniendo un gigantesco orgasmo. Martina: Mmm ahhhhh Julian: veni, te voy a cagar cogiendo putita. Martina: mmm soy toda tuya gordooo! En esa misma posición, le apoyé la pija por fuera y la comencé a refregar… su conchita se hacía agua. Quise jugar un poco con ella, calentarla… Pero luego de unos segundos… ella me agarro de la verga, y la dirigió hacia su conchita, estaba desesperada por que se la meta. Todo fue muy lento, ella sonreía con cara de atrevida… mientras yo, la penetraba cada vez más profundo. Su conchita estaba súper apretada, pues… ella solo había tenido sexo previamente con su anterior novio, y hace varios meses que no había acción. Sentí como me apretaba la verga, ella solo me sonreía y gemía un poco. De a poquito empezamos a aumentar el ritmo, con las ganas que tenia de cogerme a esa nena, me tuve que aguantar las ganas de darle a un ritmo frenético… Preferí darle lentamente… mientras tocaba su clítoris. Si notaba que a ella le gustaba y se sentía cómoda, subía un poquito la velocidad. Pasaron unos segundos, y note que ella estaba cada vez más excitada, empezaba a gemir fuertemente. Ahí puse una mano en sus tetas, y el dedo con el que había tocado su clítoris, en su boca… y empecé a ...