Mis aventuras Puteriles. El día que me comí a Ange - Relatos Eróticos

Mis aventuras Puteriles. El día que me comí a Ange

... escuchar sus gemidos, ricos.Luego, la puse en cuatro y le metí la verga lo más duro que pude, ella gritaba cada vez más fuerte y eso me prendía, un rato más ahí y luego le hice un misionero delicioso. De todas las posiciones en las que me la cogí, esa fue la que más disfruté porque podía ver su hermosa cara mientras le metía la verga, al tiempo en el que le mamaba las tetas. Como es de suponer después de un rato me vine bien cabrón. Luego de volada que empezamos el segundo round, porque con las putas hay que aprovechar cada segundo jaja. Me la cogí frente al espejo un rato y luego cambiamos para darle de perrito y de misionero. Cuando iba a terminar me sentí como en una película porno , de volada que me quito el condón y me vine en sus tetotas. Un verdadero sueño hecho realidad. Después de venirme ,le pregunté si le había gustado y me dijo que mucho. Luego se metió al baño y más tarde se despidió de mi , en cuanto salió de la habitación, yo todavía emocionado,seguía sin creérmela, me había comido a un culo de vieja, una vieja de portada de revista. La verdad, no sé porque se quejaban tanto de ella,a mi me trato muy bien ,inclusive creo que su servicio fue mejor que el de otras viejas que había contratado. No sé quizá simplemente fue suerte, muy buena suerte jajaj.