EL PODER DEL DESEO 4ª PARTE - Relatos Eróticos

EL PODER DEL DESEO 4ª PARTE

... patio ya lo habia revisado nada de ventanas de otros vecinos todo de Miguel nada de miradas indiscretas, podia tenderlo allí tranquilamente habia tendido la primera colada pues habia para dos y ahora la recogería tendería la segunda y plancharia la primera, que la habia puesto de pantalones y camisas de Miguel, la segunda de ropa interior y calcetines que aun usaba para los zapatos, las sabanas las pondria en una tercera colada pensó, mientras terminaba el dormitorio, lo observaba ahora si pensó tenia ese toque especial de limpieza y orden de una mujer, al igual que antes el salón la cocina el baño. Comenzó el planchado, le excitaba ver sus camisas sus pantalones en sus manos ya habia tendido la segunda colada la tercera de sabanas se estaba haciendo, sintió placer al tender los boxer los slip de Miguel, ahora planchando y pensando en ello pensó que le habia ocurrido, asi a solas con sus pensamientos podia pensar lo que era incapaz de decir a Miguel, al menos por ahora, si la tenía "loca" por él, no podía evitarlo, él estar sola en casa le pesaba él estar en su apartamento, no allí ahora en su casa se sentia feliz aunque estuviera sola, pero sabía que no lo estaba, pero en su apartamento era distinto, antes que era su refugio su castillo su pais, donde hacia lo que queria, ahora le pesaba necesitaba que Miguel la mirara la viera vestida de mujer, que la llamara Carmen o gordita o guapa, aquellas palabras aunque no se lo dijera a él, la hacia derrumbarse ante él, desearlo mas ...

... y mas, cuando la primera vez en el campo la azotó sus nalgas y la hizo llorar, sintió miedo panico, pero cuando estaba a solas en su apartamento cada dia lo deseo con mas fuerza que repitiera queria sentir aquellas fuertes manos golpeando sus nalgas sometiendola provocandole dolor, a la vez que la hacia sentirse sin voluntad que pertenecía a aquel macho, a cada golpe gritaba de dolor pero al instante en su cerebro se transformaba en sumisión en placer en obediencia, que le hacia desear mas y mas azotes, sentir aquella fuerte mano, cuando la penetraba que lejos quedaba aquella primera vez que ella le suplicaba que no lo hiciera ahora cuando la hacia sentarse encima de él y sentia sus manos apretando sus nalgas se sentía que pertenecia a él, de pies a cabeza incapaz de controlarse ella que siempre habia reprimido todos los deseos hasta extremos, a solo un chasquido de dedos de Miguel, haría lo que este le pidiese sin rechistar, a la vez que aunque lo hubiera dicho entre bromas y risas si interiormente se sentía su novia, lo sentía como a su novio su primer novio, pero todo esto era hasta el momento incapaz de decirlo a Miguel tan abiertmente como lo pensaba, al igual que otras cosas, si el sexo era importante, pero además había mas que eso, no sabía como se comportaría otro hombre pues miguel era el primero y unico pero si sabía que durante años por internet, todo lo que habia tocado era mala educación, bordes y su instinto le dijo siempre que no confiara y siempre lo cumplió, ...