1. Una tia que entrega todo...(2da parte)


    Fecha: 26/02/2018, Categorías: Incesto Autor: xavi33, Fuente: SexoSinTabues

    ... en la parroquia… Juan por dentro quería contestarle que ya nunca volvería a la iglesia, que ya nunca iba a seguir sus instrucciones, que iba a ser un hombre, pero solo respondió –ok ma, beso… Al colgar el teléfono, no podía contener toda esa sensación de logro, de avance, se encontraba en un mundo nuevo, y otra vez completamente excitado… Fue hasta donde estaba Mirna y la miraba con deseo, y enamoramiento, quería tomarla ya… Mirna despertó y vio a Juan mirándola, devorándola con la mirada, se sintió un poco intimidada pero cuando él le dijo –hola. Con un rostro de ángel, la ternura la invadió nuevamente. Miro a su alrededor y se dio cuenta que Juan había limpiado la escena, y la había cubierto con la sabana… es un caballero pensó… -dormí mucho? Pregunto y Juan le respondió que no… Se acercó a la cama, pero Mirna lo freno diciéndole –corazón, no está bien lo que hicimos… Juan de golpe perdió toda esa envalentonada que había adquirido, se ruborizo. –soy tu tía, soy una vieja… Mirna balbuceaba, no estaba segura de que fueran esas las palabras que quería pronunciar… hubo un silencio incómodo y Juan soltó –tenes hambre tía? Mirna se sintió aliviada y le dijo que si… El chico le preparo un sándwich y un vaso de gaseosa y se lo llevo a la cama… Miraron tele un rato, sin decir nada… De a ratos se miraban y se sonreían, Juan de a poco se fue inclinando hacia ella hasta recostarse en su brazo, Mirna se dejó deslizar hasta quedar acostada y Juan aprovecho para recostarse sobre su ...
    ... pecho, ella empezó a acariciarle la cabeza y la espalda –queres que la tía te haga dormir como cuando eras chico? Le pregunto en un tono burlón, pero él lo tomo en serio y asintió con la cabeza. Ella lo direcciono para que el chico quedara acostado sobre ella, por su peso debió abrir sus piernas y allí quedo Juan, sobre su tía, apoyando su miembro sobre la entrepierna de Mirna y con su boca pegado al cuello de ella… Mirna pasaba su mano por toda la espalda de su sobrino y la con la otra mano en su cabeza jugaba con los cabellos. Juan estaba totalmente a gusto y él también jugaba con los cabellos de su tía – te quiero mucho tía… le dijo y Mirna lo abrazo fuertemente y le dijo – mi chiquito hermoso, yo también te quiero… y Juan comenzó a besarle el cuello, suave, pasaba muy finamente su lengua contra ese cuello sedoso. Mirna cerraba los ojos, parecía luchar contra el placer que eso le causaba. Juan comenzó a mover su cintura haciendo que su pene comenzara a empalmarse y se frotase contra la vagina de su tía… Ella no podía evitar sentirse tan a gusto, sentir esos besos y ese falo duro fregarse contra su raja, sin importar que un pantaloncito, la sabana y una tanga los separaran –mi chiquito hermoso… repetía continuamente y cada vez su voz se deshilachaba. Juan, bajo sus besos al mismo tiempo que sacaba la sabana, quedándole frente a el esos deliciosos pecho con los pezones duros de excitación – no mi vida, no hay que hacer esto… dijo Mirna sin poner mucha resistencia. El joven tomo ...