1. MI PADRE MI AMIGA MAIKA Y YO


    Fecha: 02/03/2018, Categorías: Incesto Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Mi nombre es "Bimba". Nací rebelde y moriré rebelde. Soy de Zambia, y soy doptada. Lo supe desde que tengo uso de razón porque mi padre y mi madre son blancos. Mi única amiga, Maika, es de Nigeria, y también es adoptada. Somos negras, pero altas, guapas y con cuerpos de infarto. Somos jóvenes. Estamos a punto de ir a la universidad. Tenemos algo en común, aparte de ser negras, y es que las dos estamos enamoradas de nuestros padres. Las dos queríamos follar con ellos, pero no nos atrevíamos a decírselo. Que mi amiga Maika, estaba enamorada de su padre, lo supe la semana pasada, el día que me dijo, en la teraza de un bar:
    
    -Ayer noche sentí los gemidos de mi madre cuando se corría.
    
    Yo, sonriendo, le pregunté:
    
    -¿Y qué hiciste?
    
    -Correrme. Llevaba masturbándome desde que empezaron a follar. En mi pensamiento era yo la que estaba follando con mi padre.
    
    -Te voy a contar un secreto. Yo también me masturbo fantaseando con mi padre. ¡No sé qué daría por follármelo!
    
    -Ni yo por follar al mío. Se me acaba de ocurrir algo para que te lo folles, pero si lo consigues, después me tienes que ayudar a que yo folle al mío.
    
    -Habla.
    
    -¿Tu madre no está en un viaje de negocios en Liverpool?
    
    -Está.
    
    -Esta noche podría ir a dormir a tu casa.
    
    -¿Quieres seducir a mi padre? Soy yo la que quierre follar con él
    
    -Te voy a seducir a ti.
    
    -¡Anda ya!
    
    -Sabiendo que estoy en cama contigo. ¿Como piensas que reaccionaría tu padre, al sentir tus gritos de placer?
    
    -¿Quieres ...
    ... que finja un orgasmo?
    
    -No, te vas a correr con el cunnilingus que te haga.¡
    
    -¡Anda ya! Si tú no eres lesbiana, y yo, menos.
    
    -Con esa boquita que tienes, esas tetas duras, ese chochito pequeñito que debes tener...
    
    -¡Anda ya! Bueno... No sé, no sé. Ya veremos. Te espero para cenar.
    
    Llegó la noche. Estabamos cenando mejillones al vapor. Mi amiga Maika, cada vez que cogía un mejillón, miraba para mi padre, después pasaba la lengua por esa cosita que tienen los mejillones que parece un clítoris, y acto seguido se lo comía. Mi padre, no sé como estaría, pero yo tenía las bragas mojaditas.
    
    -¿Que vas a hacer en la universidad, Maika? -le preguntó mi padre.
    
    Maika, cogio un mejillón, y esta vez le pasó la lengua seis veces, antes de decir:
    
    -Ginecología.
    
    Mi padre, casi se atraganta.
    
    -Perdonadme un momento, chicas. Ahora vuelvo -nos dijo.
    
    Mi padre, que es un cuarentón muy apuesto, se levantó y se fue al servicio. Cuando sentimos que cerraba la puerta, me dijo Maika:
    
    -Seguro que se está masturbando. Ya lo tenemos donde queríamos.
    
    Mi padre, volvió. Maika, nos siguió poniendo cachondos. En fin, que fue una cena calentita.
    
    Después de cenar, mi padre, se quedó mirando la televisión. Maika y yo nos fuimos a mi habitación. Cuando ya sólo teníamos puestas las bragas y yo iba a ponerme el pìjama, sentí las grandes tetas de Maika, apretarse contra mi espalda. Con sus manos acarició mis tetas, casi igual de grandes que las suyas, y besándome en el cuello, ...
«12»