La sobrina de mi esposo (I) - Relatos Eróticos

La sobrina de mi esposo (I)

... sobre la cama clavándome nuevamente su verga de manera salvaje, definitivamente había entendido que necesitaba ser usada como puta en ese momento, cuando empezó a bufar y gemir me la saco y se vino a mi boca haciéndome que se la tragara mientras me ahogaba con su semen en mi garganta, no quería tragármelo iba a salir para el baño cuando me cogió del cuello y me obligo a tragármelo todo, la verdad casi no lo hago porque no me gusta pero ese día se la deje limpia, cuando terminaron sus espasmos me dio una bofetada, que me tomo por sorpresa mientras me decía -me gustas más cuando eres puta-, se fue al baño y quede ahí pensando que lo que hizo me había gustado tanto que me frote el clítoris mientras el volví del baño, no me di cuenta cuando regreso pues me quede dormida de una.

Al día siguiente me desperté muy feliz me sentía súper genial después de esa noche, aunque en el fondo sentía pena de haber leído la conversación de Sofía, pero no sabía si debía contarle a mi esposo o quedarme callada. Una parte de mi pedía agritos contarle porqué me excite tanto, pero otra parte de mi quería ganarme la confianza de ella y seguirle prestando mi MAC, así podría seguir leyendo sus conversaciones con el tipo ese, la verdad no tuve mucho que decidir en la tarde Sofía se acercó a mí de una manera jovial, -amaneciste contenta tía- sonrió mientras me saludaba, en ese momento me ruborice de la pena –si tengo buen humor, digamos que tuve una buena noche- medio me apene mientras le decía eso, ...

... por mí no hay lio por el contrario disfrute mucho de tu entusiasmo, me miraba diferente con coquetería –perdona Sofía prometo no volver a perturbarles el sueño, que pena-, no te preocupes tía por favor hazlo cuando quieras es muy sensual escucharte ojala yo pudiera ser como tú-, en ese momento me quede mirándola como tratando de entender si lo que quería era contarme algo o abrir la puerta a una conversación, -Sofía tu sabes que yo estoy para ayudarte en lo que quieras o solo escucharte, ya estás en la edad en que quieres explorar y eso no es malo, solo que debes tener cuidado de no equivocarte y mandar las señales erróneas, si no quieres no tienes porque contarme, pero te prometo que lo que me cuentes será entre las dos-, ella se quedó callada pensando -gracias tía pero no tengo mucho que contar hay un par de chicos que me molestan pero no ha pasado nada, me han intentado manosear pero hasta ahora nada, hay un amigo con el que siempre hablo pero nada más, en ese momento me quede callada será que de verdad me estaba diciendo la verdad porque al amigo le dijo todo lo contrario, el problema era que como siempre nos decía mentiras concluí que una vez más me estaba midiendo así que le seguí el juego.

Pues princesa si es así te felicito, sin embargo si pasa algo debes tener cuidado de no estar con uno de esos chicos que se aprovechen de ti te usen y luego no los vuelvas a ver sino cuando quieren usarte otra vez, que tu primera vez sea con un niño tierno que te trate amable y te ...