La primera vez de mi esposa con otro
Fecha: 12/07/2017,
Categorías:
Voyerismo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Sabía que el joven de 19 años estaba totalmente infatuado con mi esposa de 32. ¿Y porqué no habría de estarlo? Ella es una esbelta rubia curvilínea de 1.66m y 55kg. Sus pechos son firmes con pezones que parecen estar duros todo el tiempo.
David había estado trabajando con Karen como tres meses y medio. Lo hemos tenido en la casa en varias ocasiones, incluyendo alguna vez el cuidado de nuestros gemelos de 6 años. No había hecho caso de la manera obvia como miraba a mi esposa, considerándolo un enamoramiento juvenil. Mi esposa y yo habíamos platicado sobre ello, y ella lo consideró "algo simpático"
Se llevó a cabo una fiesta de la Compañía en un hotel cercano a la playa, donde había virtualmente todo: Paseos a caballo, natación, pesca y demás. Mis hijos quisieron ir de pesca y mi esposa y yo pensamos que sería bueno que yo los llevara, junto con otros muchachos. El plan era salir en bote por un lapso de mas de tres horas. Me di cuenta que ella así lo prefería. David no podía apartar la mirada de su escote, de sus levantados pezones, de sus largas piernas con los dedos de los pies coquetamente pintados. Su cuerpo sensual apenas cubierto por un ligero vestido veraniego. Me reí entre dientes, adivinando cuales eran los deseos del joven.
Cuando llegamos a la playa ya la expedición estaba organizada. Había tres botes, cada uno con doce gentes. Ya estaba establecida la supervisión de los adultos y solo quedaba espacio para mis dos hijos. Así que los dejé ir tranquilos. Me ...
... quedé platicando con algunos compañeros durante una media hora, planeando jugar golf mas tarde y me regresé a la posada para encontrarme con Karen.
Cuando estaba cerca, vi a Karen y a David entrar por una puerta lateral del edificio principal. Los seguí. Conforme me acerqué mas, pude ver sus siluetas a través de las delgadas telas de las cortinas. ¡Se estaban besando!
Karen tenía sus manos sobre el pecho de él, empujándolo con gentileza y volteándole la cara, pero él estaba obviamente diciéndole algo al oído y tratando de besarla. Me reí para mis adentros, pensando: "Vaya fresco"
Nomás para ver que sucedía, corrí a la parte de atrás y entré por el área de descarga de víveres, atravesé la cocina desierta hacia el área de servicio, a un costado de los salones de banquetes. Desde ahí se podía ver el interior de los salones a través de unas persianas que cubrían las ventanas. Probablemente fueron diseñadas para que los meseros y ayudantes de cocina pudieran ver en los salones cuando se requería de sus servicios sin tener que entrar a los mismos.
Podía ver perfectamente a David y Karen a menos de tres metros de distancia. Ella estaba sentada en una silla y David desde enfrente se inclinaba sobre de ella, besándole la frente y los párpados. Continuó besando su cara hasta llegar a sus carnosos labios y esta vez pude ver como pasaba su lengua sobre los labios de mi esposa.
"Bueno, veremos que pasa" Pensé, creyendo que ella se pararía y se iría. Pero en vez de eso, volteó ...