1. Fin de semana


    Fecha: 20/03/2018, Categorías: Infidelidad Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Debía ausentarse de casa al menos tres días y la feliz idea fue que su hermana pasase por nuestra casa y me trajera la comida.
    
    Pero fue algo más que la comida.
    
    Hubo de todo .Siempre la había acosado un poco y le había tocado el culo y pellizcos , pero el azar quiso que pasara lo siguiente.
    
    Quedamos al mediodía en mi casa y la saludé feliz con un cariñoso beso.
    
    Le halagué un poco sus oídos y tomamos uun aperitivo , total que como era la hora de comer lo hicimos los dos.
    
    Reímos y bebimos bien , sus colores y y su alegría la delataban.
    
    Caímos en el sofá y dormimos.
    
    Me desperté antes y la miré .
    
    Estaba hermosa o al menos mis ganas me lo decían.
    
    Me toqué el paquete y se puso alegre.
    
    Me estaba empalmando y mi cuñada estaba a tiro.
    
    Despertó y con deleite vió mi bragueta y pensó que era un guarro por estar así.
    
    Le dije que no , que la había mirado con ojos libidinosos y el resultado estaba a la vista.
    
    Me echó la mano encima y aquello fue el inicio de un completo encuentro que duró todo lo ...
    ... que quisimos.
    
    Tres días sin salir de casa dan para mucho.
    
    No nos cortamos nada y nos dimos caña hasta hartar.
    
    Su forma de follar es extraordinaria , come , besa , muerde , se abre , me toma , vamos una profesional.
    
    De tanto arle el primer día me pidió que no entrara más porque tenía todo el cuello de entrada rojo .Y claro hubo que relajar para poder continuar más tarde.Me confesó que siempre le había gustado y convinimos en no dejar pasar ocasión que tuviéramos.
    
    Como no trajo más ropa que la puesta , sus bragas estaban ya un poco olorosas y las lavó.
    
    Tuvo que estar con el conejo al aire y se la veía contenta.
    
    A medida que pasaba el tiempo nuestros besos eran más intensos y culminábamos pero después de largos abrazos .
    
    Le miré bien el clítoris y asomaba una cabecita que mi mujer no tiene.
    
    Lo chupé una y otra vez y ella consintió todo
    
    Como yo , ella también vació mi polla derramando todo por su vientre .
    
    Quedamos en vernos de nuevo en otro encuentro íntimo y ahora somos amantes ocasionales. 
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