En la discoteca
Fecha: 13/07/2017,
Categorías:
Hardcore,
Voyerismo
Autor: veronika79, Fuente: xHamster
... mí mismo pensando que sería un farol, que no era capaz de dejarse joder en los servicios por cualquiera. El otro se levantó a por otra copa. Al volver se me quedó mirando. - Vaya mujer más puta tienes.... Miré el reloj... Habían pasado unos 10 minutos desde que les perdí de vista... - ¿Llevan mucho? -preguntó arrastrando la lengua por el alcohol- Eso es que te la está poniendo una buena vara... Ni le contestaba... y él venga a hablar, venga a decir bobadas... hasta que de repente le escuché decir: - Venga acaba la copa. ¿Qué? ¿Vamos a los servicios a ver cómo se la están tirando? No pude decirle que no. Llamó a una puerta con suaves golpecitos. - Abre, soy yo. Allí estaba ella en cuclillas, espatarrada como si fuera a mear, haciéndole una soberbia mamada al gorila. Tenía la blusa recogida sobre la cintura con las tetas fuera y se había remangado la falda. Me miró unos segundos. No se m*****ó ni en sacársela de la boca. Siguió chupándosela como si tal cosa. No tardó nada en correrse. Al primer chorro, la sacó y se la restregó con la boca cerrada por los labios. El semen la colgaba por los morros como si fuera espuma. Cuando acabó se la escurrió en su cara y tranquilamente se la guardó. Ella se relamió lascivamente, recogiendo con la lengua todo el semen que pudo. El otro reclamó de nuevo su turno. Ya la tenía fuera de los pantalones. Ella pensó que también quería que se la chupase y acercó la cara. - Quita, guarra, ni me acerques esa boca. Date la vuelta, zorra. La hizo ...
... apoyar las manos en la cisterna y levantar el culo. Metió la mano entre sus piernas y le abrió el coño con los dedos. No tardó más tiempo que el necesario para atinar a metérsela. La sujetaba por las caderas y no paraba de darla rápidos viajes metiéndola todo el rabo hasta los huevos... Ella gemía con sus empujones... El gorila puso su brazo sobre mis los hombros, como con un gesto de camaradería... - Vaya polvo que te la están echando, colega... ¡Joder!... y a la tía la va la marcha... Volví la cara hacia él. No era una pregunta, era un gesto de asco, pero pasó de mí y me restregó aun más la situación. - Vamos, que folla con ganas... ¡Ufff! Le tenía el rabo metido hasta lo cojones y la tía me decía dame más, dame más... reviéntame el coño... que se note que estoy bien follada... Menudo vicio que arrastra... ¿o es hambre? ¿Qué pasa, no la follas bien? Violentamente intenté quitarle el brazo de mis hombros, pero con un sólo gesto me lo impidió. - Tranquilo, hombre. No te ofendas... Si es que en cuanto se ha corrido se ha lanzado como una loba a comerme el rabo. Sus gemidos ya eran escandalosos. El ruido de las pelvis al chocar contra sus nalgas... el chapoteo de su coño... Ese maldito concierto se me estaba metiendo por la cabeza haciendo hervir la sangre. - ¡Joder, cómo te la va a dejar!... Esta noche te vas a comer las babazas de todos tíos... Esta sale de aquí con el coño como un charco de ranas... y tú con más cuernos que un rebaño de ciervos. Repentinamente llamaron a la ...