Parking - Relatos Eróticos

Parking

La cita había sido muy rápida, improvisada en el último momento. Una escapada de una tarde de Oficina soporífera. Un café y una infusión aderezados con unas risas y confidencias y alguna llamada m*****a al móvil. Llegaba el inquietante momento de la despedida.- Tengo el coche aquí cerca, en el Parking.- ¿El de la Plaza? - Preguntó ella alzando las cejas.- Ese mismo.- Yo también - Una sonrisa dibujó su cara.Caminando por la Plaza, en busca de la entrada, los brazos de él la asían por la cintura con la excusa de unos pasos erráticos provocados por el suelo imperfecto de Madrid y de sus tacones de vértigo.Bajan las escaleras despacio tratando de alargar el momento. Besos furtivos se escapan en el rellano. Momentos rotos por el cruce fugaz de algún viandante: "Buenas tardes" cruzados.Cualquier excusa era buena para acercar los dos cuerpos: "Espera que ya te ayudo con el Cajero".Se dirigen al coche de ella serpenteando entre el resto de los vehículos. La tenue luz acompaña. Ella delante, él detrás. Se da la vuelta de repente y sus labios se encuentran. ¿Casualidad?Un par de paradas mas y alcanzan su objetivo. Abre la puerta del coche y se agacha para dejar el abrigo y el m*****o bolso. El se acerca, demasiado, y la coge de las caderas. Unos movimientos circulares de su culo apretando la entrepierna. Resguardados por la seguridad de la puerta abierta agarra la mano de el, firmemente, y la desliza sorteando la cintura de la falda y la ropa interior. El siente la humedad. Ella ...

... aprieta su culo y su cuerpo contra él. La acaricia muy sutilmente.Aparece un coche. Disimulan. La mano de él por encima de la cintura. Risas. "¡No tiene otro sitio para aparcar.....!". Apenas desaparece el vecino es ella quien la atrae hacia su cuerpo y se funden en un profundo beso.Ella se sienta en el coche con las piernas hacia fuera. "Ven, dame un beso". Sonriendo se acerca a la boca de ella. Un beso corto ya que ella coge con las dos manos su cabeza y susurrando "Aquí no" la baja sin parar ni siquiera en el escote hasta situarla debajo de su falda. Apenas se escucha un "¡Aquí si!. No hay mas remedio que ponerse de rodillas. Suavemente acaricia su sexo con su lengua y sus labios. A veces despacio, a veces rápido. Siempre con mucho cuidado. Mientras ella no deja de apretarle contra si. Cierra los ojos y se muerde los labios. El corazón y la respiración se aceleran. Algún ruido externo hace que los abra ligeramente: "No hay peligro, demasiado lejos". La escena continúa hasta que su cuerpo empieza a estremecerse, apretando su cabeza al extremo, con unas ganas de gritar.... El corazón a tope. Varios espasmos anuncian un orgasmo silencioso. Ella mira hacia abajo pero no alcanza a ver la cabeza de él, oculta debajo de la falda. No deja de apretarle. Consigue así alargarlo con varios microorgasmos.Por fin le libera. Aparece la sonrisa de él por debajo de la falda. Se incorpora hasta alcanzar su altura y se vuelven a fundir en un beso interrumpido momentáneamente para recuperar el ...