Ivanna La Odontologa - Relatos Eróticos

Ivanna La Odontologa

... empecé a vestir estaba muy caliente la verdad no sabía qué hacer, comencé poniéndome un calzón rojo con un moño en la cola y bien pequeño y unos bracieres rojos floreados bien pegados a mis tetas, luego me puso unos leggins negros que se amoldeaban a mis nalgas y piernas y hacia relucir esas parte, además de una blusa escotada blanca donde se veían mis tetas bien apretadas y hermosas y para terminar unos tacones obviamente me pinte los labios rojos y me veía espectacular en el espejo hace mucho tiempo no me vestía tan sexy me encantaba como me veía una verdadera diosa me resaltaban todos mis atributos nada se quedaba escondido quería verme genial además de mi pelo rubio bien largo y mis ojos verdes Cuando baje lentamente por las escaleras vi al muchacho y se quedó atónito al verme no podía hablar solo abrió bien los ojos sin decir nada con la boca abierta un poco de torpeza solo le regalaba una sonrisa de mis labios rojos, poniéndome mis manos en la cintura - Ojalá no me hallas esperado mucho- - No Ivanna tranquila- - Y que te parece como me veo?- - Te ves muy hermosa, todo eso te queda muy bien- - Gracias muchacho vamos a comer algo que se nos hace tarde- Mientras le di un fuerte abrazo por las palabras bonitas que me dijo lo apreté bien fuerte a lo que el me agarro de la cintura apretándome y bajando casi a mis nalgas y yo oliendo su perfume me percaté que el rosaba su cara frente a mis tetas lo que desde luego me excito un sin fin aquella escena era algo tierna aunque ...

... sabía que cualquier cosa él iba aprovechar claro. Cuando salimos fuimos a comer algo al Hard Rock Café, que tenía un buen ambiente podía notar las miradas lascivas a toda mi anatomía no solo del hermano de mi novio sino de todos los hombres que me miraban de una manera que me querían comer toda yo sudaba y sentía cosquillas en todo mi cuerpo y no era para menos me veía muy sexy era una combinación de todo, estuvimos en el lugar comiendo por hora y media, luego antes de irnos fui al baño a retocarme la sorpresa fue cuando un mesero me agarro de la mano, él era un hombre blanco, joven, fuerte se notaba que iba al gym y tenía tatuajes, muy apuesto. - Suélteme muchacho si no grito- - Solo quiero decirte que estas riquísima, me paraste todo, esas tetotas que tienes se ven apenas para estrujarlas y larmerlas y esas nalgas que tienes que están pidiendo que te cojan te pasas de rica- - Suélteme suélteme o grito se lo estoy diciendo- - Mira como andas vestidas para provocar a todos los hombres mi amor- Ya en eso el me besó en la boca me metió toda la lengua mordiendo mis labios, yo me quitaba pero en eso el me agarro y me jalo al baño donde me metió, nos empezamos a besar, lengua con lengua yo no podía resistirme más estaba excitada de hacerlo con un desconocido en un restaurante, seguimos besándonos cuando, el me quito la blusa de un jalón y dejó mis pechos solo con los brasieres. -Mira que tetas tienes son una belleza como a mí me gustan- A lo que solo hacía gemidos pequeños, me quito ...