Como me gusto la lenceria de mi mujer
Fecha: 27/04/2018,
Categorías:
Transexuales
Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues
... por el estilo, pero que así como éramos una pareja aparentemente feliz para nuestro entorno, le pedí que me ayudara a sentirme bien y poder cumplir con ella como marido, fue así que le conté que había encontrado su ropa interior y para mi sorpresa, también le conté que hasta había una con semen, a lo que ella me miro extrañada y diría que con algo de culpa en su mirada, que no le reproche esto, pero si le conté que me había gustado, cosa rara, lo que había hallado y que me deleito sentir su olor de hembra en celo que acababa de tener una cogida fuera de mi casa, con alguien que seguramente la había hecho sentirse mujer y también deseada, que esperaba, se lo dije, que la experiencia sexual fuera de casa le haya hecho sentirse deseada y bien culeada y siendo tan liberales como éramos, no me sentí mal, al contrario, me alegraba que todavía sea deseada y cogida por otro y le comentaba que me gustaría una reunión con una pareja amiga para hacer un intercambio, propuesta que no le incomodaba y diría que hasta lo deseábamos. También le conté que así como me gusto su olorcito de la tanga, me la probé y me quede embelesado con ella y me masturbe hasta venirme en su ropita y me sentí bien después de mucho tiempo, solo me decías, que más te gusta de esto y hasta sonreías con lo que escuchabas y que cada vez que las encontraba, me masturbaba con ellas y me las ponía durante el día e inclusive me iba al trabajo con ella puestas. Primero eran las tangas, luego los hilos dentales sucios ...
... que me hacían sentirme provocativo cuando se me metia en la raja y caminaba con ellas puestas y me sentía deliciosamente arrecha, si, asi en femenino, arrecha, pero como hacértelo saber y menos ahora que me has visto vestido así, como una putita arrecha, pero todo esto ha sido por ti, no sabía cómo satisfacerte y me encontraba pensando en la manera de decirte que de repente por los años que estamos casados, la confianza, el desenfado que siempre tuvimos cuando hacíamos el amor, todo estaba permitido entre nosotros, que hasta me metías tus dedos y como me gustaba, te repetía si podíamos tener una aventura los dos con una pareja amiga que quisieran hacer un intercambio, si accedías por supuesto o con algún compañero de trabajo para un trio, no sabía amor, no sabía, de repente esta propuesta para gente liberal como nosotros nos hubiese comprometido más, no se amor, ahora que te lo digo, solo quiero saber cómo vamos a terminar con esto. Es por este motivo, que tu sin saber, cuando te pedía que me prestaras tu lencería, cuando estábamos juntos, me atrevía a probármelas delante de ti y la manera como sonreías cuando las tenía puestas, me animo a seguir, después me prestabas tus sostenes y me vestía para ti y debes haberte dado cuenta, me ponía arrecho y hasta se me paraba la pinga y aprovechábamos estos momentos para tener el sexo desenfrenado que añorábamos y que se había perdido, mas por mi edad que por ti, como me gustaba hacerte sexo oral, lamer tu clítoris, sentir como se ponía ...