Jugar con fuego quema
Fecha: 28/04/2018,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo1, Fuente: CuentoRelatos
-Tengo una preguntita para ti
-Dime
-Quiero probar lo que tengo contigo todos los juguetitos de exclavitud que tengo en mi casa
-MMM… suena interesante
-Lo probé con Daisuke y no te imaginas la safiscacción que sentí cuando se retorcía del dolor
-MM... Y ahora quieres probarlo conmigo, ¿verdad?
-Exactamente
-Suena muy excitante para mis oídos, ahora quiero que suene excitante para mi cuerpo
-Es muy sencillo, mis demonios internos quieren hacer locuras sobre tu cuerpo, y yo disfrutar de tí
-Me gustará
-No te arrepentirás ¿aceptas la oferta?
-Estaré encantado de satisfacer a tus demonios, hace tiempo que necesito emociones fuertes
-Las tendrás, necesito dar uso a mis más bajas pasiones.
Tras esa conversación, Takeru no volvió a contactar con Ken para nada, habia provocado lo que él quería, dejar volar la mente con lo que podría hacer con él, y sobre todo, crear ansiedad en Ken, ansiedad que hizo a Ken una noche querer ver con urgencia a Takeru
Fue de noche a su casa, extasiado de someterse a sus manos, llegó y toco el teléfonillo esperando a que el dueño de la casa abriera, al abrir este los dos se quedaron en silencio, despues Takeru habló, jugando un poco
-Oh, ¿puedo ofrecerte algo?
-Estoy aquí para que juguemos a lo que acordamos hace unas semanas -.Le sonrió seducturamente, su voz, aunque serena, estaba disfrazadada de ansiedad sobre todo en un chico como Ken que nunca a esta hora estaba en la calle
-Me pillas ocupado, ...
... querido -. Le devolvió la sonrisa pero él un poco mas macabra
-Bueno, me encantá volver y echar un vistazo en algún momento si es posible-. En realidad no queria irse, sus instintos sumisos le habian llevado hasta ahi y ya no queria irse
Ahora estaba aquí en su puerta principal, finalmente Takeru le dejó entrar y le condujo hasta el fondo de su habitación, al entrar ya todo estaba preparado con todo tipo de artilugios. Algunos parecían bancos con arneses atados y otros parecían dispositivos de tortura de la Edad Media.
-Oh... Este me gusta -. Se acercó a una mesa con lo que parecían unas mordazas de cuero que se abrochaban a las piernas y los brazos.
-Es algo que puede ser divertido si colaboras
-Te costaron mucho?
-Para una belleza como tu y con ese cuerpo nada cuesta caro
Ambos chicos se sonrieron y Ken estuvo observando el artilugio con detenimiento ante el silencio que crearon los dos
-Creo deberías probarlos primero para asegurarte de que es lo que realmente quieres-. Rompió el silencio Takeru mirandole
-Puedo? -preguntó mirandole de vuelta, el dueño de la casa le sonró seductoramente como respuesta.
- Por supuesto. Podemos hacer una simulación sólo quítate la ropa y sube aquí -. Dijo señalando la mesa acolchada.
-¿Por qué tengo que quitarme la ropa?-. Contestó con sarcasmo, como si no supiera lo que iba a hacer con él
-Para obtener el efecto completo -. No dijo nada más, se quedaron ambos mirandose
-De acuerdo-. Contestó Ken y se quitó ...