Mis ricas primas - Relatos Eróticos

Mis ricas primas

Resulta que mi tía tiene dos hijas que en aquel entonces tenían María y Carlas, una morritas bien ricas y de nalgas respingadas que eran apetecibles y yo a la edad de 15 años ya le metía el guevo al primer hueco que se me pusiera delante. Primeo me les insinuaba y buscaba la forma de sentarlas en las piernas y con el guevo erecto que para aquel entonces era de 15cm y yo las movía encima de mi, era muy rico, aveces llegaba el momento que ellas mismas se sentaban solas y hacían lo ya aprendido. Resulta que un día pude llevar a María a una plantaciones y me cerciore de que nadie nos hubiera visto y mientras ella caminaba yo le apretaba sus nalgas y le decía cosas ricas, hasta que llegamos al tronco de un gran árbol y le dije, que ese era el lugar donde nos íbamos a divertir mucho. entonces le baje sus pantaloncito y puse mis dedos en su vaginita y le bese la boca, subí mi mano la ensalive y la volví a bajar para mojar esa vagina virgen, entonces me agache y la olí y pase mi lengua, ella temblaba su cuerpo se contraía y puso sus manos en mi cabeza para que no me separara. En eso llega mi otra prima la menor Carla y me dice que están haciendo, María se quedo asustada y yo le dije, amor, estamos jugando, pero es un secreto, quieres tu también y ella se acerco y le quite su ropa interior y le hice lo mismo, la forma en que ella sentía parecía que era mas intensa que su hermana mayor por la forma que se retorcía de placer mientras se apoyaba al árbol. Entonces la mire le di un beso ...

... y le dije, mi vida espera un rato más que tu hermana llego primero y luego le duele sino termino de atenderla a ella primero, entonces tome de la mano a la mayor y le levante su pierna y volví a lubricar mucho y apunte con mi guevo y poco a poco aguantando los gemidos y dolores de mi prima pude quitarle su virginidad y embestirla suavemente hasta que ella misma me pedía que fuera mas rápido. Así estuve un tiempo hasta que sentía que me venía y la saque y tire mis chorros de semen sobre su vagina y me agache y lamí mi semen desde su vagina ella me decía que se orinaba y yo le dije que sí, y entonces pude sentir el sabor del orgasmos de mi prima junto con mi semen. La menor estaba de pie mirando todo y le dije ven nena que te toca a ti ahora, y ella se topaba su vagina como queriendo sentir pero como no sabia como era la masturbación femenina no llegaba al placer entonces le mostré con su propia mano como era, para que cuando estuviera solo ella disfrutara. En ese momento yo como buen primo también quería que tuviera su primer orgasmos y entonces mame su clítoris y labios superiores le di dedos, sin hacerle daño hasta que ella me dijo que se orinaba, realmente daba gusto ver aquella escena. Una vez que termine las limpie con un pañuelo que llevaba para la ocasión las vestí mientras las besaba y me prometieron no decir nada a cambio de mas placer. Claro que la menor también iba ser desvirgada por mí, pero sería en otra ocasión y ese va ser otro relato donde el padre nos cogió ...