1. MATEO


    Fecha: 09/05/2018, Categorías: Gays Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... ajustaba a la perfección, corrí con delicadeza las sabanas que le cubrían hasta la cintura, llevaba unos calzoncillos a cuadros de color verde, ligeramente holgados. Vi parte de su abdomen con vellos hasta el ombligo, pose mi mano en una sus piernas que estaban bien torneadas y con algo de vello, la deslicé hacia la abertura del calzoncillo y toqué sus testículos, me parecían enormes, estaba tocándolos cuando siento que su pene se mueve y se va hinchando, quité la mano enseguida pensando que estaba a punto de despertar, pero seguía durmiendo. Me excitaba que fuese tan peludo en esa zona, a diferencia del resto de su cuerpo. Sentí de repente un cosquilleo intenso en mi pene y cuando me toque tenía un líquido espeso y pegajoso en la parte superior, supuse que era lo mismo que les salía a los sujetos en las revistas pornográficas. Fue tan increíble que por unos segundos olvidé lo que estaba haciendo y cuando reaccioné vi a Mateo sentado en la cama mirándome fijamente, me agarró del brazo dándome vuelta y me sujeto ambos con fuerza, no podía gritar. Me preguntó qué estaba haciendo, no respondí, me acercó más hacia él y me preguntó por qué lo estaba tocando, no respondí. Me acostó en la cama sin dejar de sujetarme los brazos, yo dándole la espalda y con lado izquierdo de mi rostro hundido en el colchón seguí sin pronunciar palabra. Me bajo los calzoncillos dejando al desnudo mi culo y con su mano me toco con fuerza hasta sentir su pene caliente sobre mis nalgas, lo dejó ahí, ...
    ... caliente sobre mí. Me dijo muy cerca al oído; si va a ser, será a mi manera. A continuación me quitó la remera, me levantó con fuerza y yo no podía intuir que iba a hacer conmigo. Para mi sorpresa y horror, me llevo a la cama de Luca, me bajó con fuerza al costado de la cama y bajó mis calzoncillos, quedé entonces de rodillas a un extremo de donde dormía con Luca minutos previos, con la parte superior y boca abajo sobre el colchón, mirando siempre a Luca rogando que no despertase. Sentí el calor de su torso en mi espalda y al oído me dijo que si gritaba Luca se despertaría y todo se iba a la mierda. Metió su pene con fuerza dentro mio, sin contemplaciones, grité en silencio y Luca no se movió pese al brusco movimiento, Mateo no se detuvo, sacaba y metía una y otra vez su grueso fierro caliente, la cama se movía aunque no hacía ruido, sentí un líquido de fuego en mi culo, exploté en mil sensaciones y pedí que no parase. me levantó una vez más, me llevó a su cama, Luca seguía durmiendo. Mateo me arrodilló junto a su cama y dijo sin vacilar: vas a besar mis pies e irás subiendo lentamente a medida que te lo indique hasta llegar a mis pelotas. Busque sus pies, primero el derecho y lo besé, pasando mi lengua desde el talón a los dedos, eran perfectos, pies delgados, dedos largos y prolijos, los besé con amor. Me dijo que subiera, besé sus piernas, llegué con entusiasmo a sus huevos peludos, ese olor particular me volvía loco, era el de un hombre. Su pene duro y grueso se humedeció en ...