1. Penélope, la mujer ideal (Parte 2 de 3)


    Fecha: 17/07/2017, Categorías: Infidelidad Autor: dulces.placeres, Fuente: CuentoRelatos

    ... mermelada de naranja, los dulces de abuela eran demasiados tentadores y como acostumbraba a hacer opté por ir a andar en bicicleta.
    
    Salí a rodear el lago por los pequeños caminos que se abrían entre los árboles, solo se escuchaba el incesante cotorreo de las loras que anidaban en las alturas, respiraba tratando de llenar mis pulmones con naturaleza, se acercaba el fin de las vacaciones y el retorno a la jungla de cemento.
    
    Después de diez minutos la calma fue interrumpida por los gritos de Penélope
    
    -Facundo! Facundo!
    
    Al oírla, paré y giré, la joven venía a prudente distancia en otra bicicleta clamando por que me detuviera.
    
    No pude solo que volver a embriagarme con su figura, tenía un top blanco cortito sin hombros, apretado, dibujando sus tetas perfectas, marcando sus pezones, como siempre su vientre desnudo con su cintura avispada, unas calzas negras con corte que simulaban ser un pantalón con cierre dorado al costado, pero que inevitablemente se adhería pecaminosamente a su silueta, unas botas negras media caña, más propias de equitación que de ciclismo, esa mocosa sencillamente me quitaba la respiración, su cuerpo era un intrincado y perfecto camino de curvas y contra curvas el cual estaba dispuesto a transitar, pero algo se mi orgullo seguía herido, entonces ella tomó el diálogo un tanto agitada
    
    -Facundo, por qué me evades?
    
    -Evadirte? yo no te evado, pero no me gusta que se burlen de mi…
    
    -De acuerdo, si tanto te molestó te pido ...
    ... disculpas…
    
    -Penélope, tengo más de cincuenta, no me gusta ser el payaso de la fiesta…
    
    -Ok, ok! Perdón, perdón! fue solo un juego, apenas tengo veinte… - sentenció como haciendo un contrapunto con mis palabras.
    
    Seguimos pedaleando unos minutos en silencio, uno a la par del otro, como meditando las siguientes palabras, ella volvió a la carga
    
    -Te parezco bonita?
    
    -Vamos… volvemos al juego? es necesaria esa pregunta? – contesté secamente adivinando que jugaba conmigo
    
    -De verdad Facundo! Sé que soy bonita, pero quiero saber si para tus ojos soy bonita…
    
    -Vaya pregunta… debería arrancarme los ojos para no mirarte, eres la criatura más perfecta que sin duda Dios ha puesto sobre la tierra!
    
    Ella rio por mi cumplido y seguimos un poco más hasta parar a descansar sobre un fresco y verde césped a la orilla del lago, dejamos las bicicletas a un lado y comprendimos que estábamos absolutamente solos en ese punto del universo, el sol estaba casi en el horizonte, en ese lugar donde se ve gigante y uno casi puede mirarlo cara a cara sin dañarse la vista, las cotorras del atardecer comenzaban a callarse y daban lugar a los primeros violines de los grillos que habitaban el lugar, no sabía qué hacer, no quería pasar por un degenerado pero tampoco quedar como un estúpido que dejó pasar la oportunidad, pregunté entonces a Penélope que observaba en silencio como bajaba el sol
    
    -Por qué hacemos esto?
    
    -Esto? qué es esto? – respondió buscando que sea directo con la pregunta
    
    -Esto, desde ayer ...