Lecciones privadas
Fecha: 18/05/2018,
Categorías:
Jóvenes
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Esto paso hay algunos años, cuando las computadoras no eran tan populares como ahora, porque costaban mucho. Desde algunos meses vivía en un bonito departamento, y en un cuarto había instalado mi oficina. A veces, cuando regresaba de una cita con un cliente, me paraba a tomar algo, un café si era por la mañana o un refresco si era por la tarde, en la terraza de un restaurante a unos cuadros de mi oficina. Una tarde, regresando después de haber hablado con un cliente sobre un trabajo que quería confiarme, me pare a una mesa que estaba libre en la terraza del restaurante, tomando notas en un papel todo lo que tenía que hacer los próximos días. Sentadas en la mesa al lado de la mía había dos jovencitas que, por el uniforme que llevaban, falda azul a cuadros, blusa blanca y corbata color vino, supe que frecuentaban el bachillerato que estaba cerca. No puse demasiada atención a las dos muchachas, pero, a un momento, levantando mi mirada, tuve la impresión que me estaban mirando, así que las mire también saludándolas. Bajaron su mirada, sorpresa de mi reacción. Después de un momento, recogí mis papeles y me levante para regresar a mi oficina, y pasando cerca de la mesa de las dos jovencitas, las salude de nuevo con una sonrisa. Algunos días después, pasando delante la terraza, vi que una de las jovencitas estaba sola sentada a la mesa. Tome plazo en una mesa al lado de la suya, y note que siempre miraba en dirección de la avenida. –“¿Estas esperando tu amiga?”- le pregunte con una ...
... sonrisa.
Me miro un poco sorpresa, antes de contestarme: –“Si…fue a comprar algo para la escuela y debería haber llegado…”- - “Veo que está tardando…así, si quieres, podemos hablas los dos hasta que llega…así el tiempo pasara mas rápido”- Me miro de nuevo como si no sabía que decir. –“Parece un poco tímida…no tener miedo…solo quiero hablar contigo”- -“No se…no estoy acostumbrada a hablar con alguien que no conozco… ¿y de que quieres hablar?”-
Fue así que nos conocimos. Se llamaba Claudine, y estaba en secundo año de bachillerato, a pesar que tenía casi 19 años, porque había decidido de estudiar después de haber trabajado casi 2 años en una oficina privada. Había tenido un novio, pero ahora estaba sola.
Durante los siguientes 3 meses, nos reunimos algunas veces en la terraza del restaurante, y llegamos a ser buenos amigos. Una vez me confesó que le gustaba hablar conmigo. –“Me gusta hablar contigo…porque hablas de cosas diferentes de lo que hablo de costumbre con mis compañero y compañeras de clase…y no tengo muchos amigo…así que hablando contigo aprendo cosas diferentes…cosa de la vida que no conocía…y además me agrada tu madurez”- -“Estoy contento que te gusta hablar conmigo…y aprenderte algo de la vida real…que es muy diferente de la que vives ahora con tus estudios”-
Una tarde, mientras estaba sentado con ella en la terraza, recibí una llamada de un cliente que quería verme rápidamente, así tuve que dejar Claudine y regresar a mi oficina.
Cerca de una hora ...