1. PAREJITA QUE SE ANIMO AL CUCKOLD


    Fecha: 24/05/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... pareja puede entender libremente -según su morbo- como cierta humillación, o demostración de dominio de la situación, sin que sea en modo alguno la finalidad del “obsequio”. no me gusta nada la humillación, pero mucho la complicidad). S la tomó y al verla rota de un lado se alarmó, preguntando porqué estaba rota, entonces M dejó la chupada que me estaba dando y lo calmó diciéndole que fue ella quien la había roto, porque había entendido mal que yo le pedí eso (la verdad es que me encantó el modo en que le contó lo que hicimos en el auto mientras íbamos al bar, que el trato que le había dado era muy respetuoso, que era un dulce, y demás que no escribiré acá. LO PROMETIDO, CUMPLIDO S). El se llevó la tanga a la nariz y la olió profundamente, lamió la tela todavía mojada y sonrió al tiempo que anunciaba que estábamos llegando al hotel. Nos acomodamos la ropa antes de bajar del auto, pedimos habitación y entramos, primero ellos, yo detrás. Sin tocarse ni besarse (lenguaje corporal que dice muchas cosas), S fue a sentarse al banco alto del barcito que está en un rincón, se aflojó el pantalón y se sacó la remera, casi inmediatamente, se preparó para disfrutar del espectáculo que había imaginado tanto tiempo. M subió la escalerita hasta el desnivel donde está la cama, y más allá el jacuzzi, apoyó la cartera y el celular sobre una de las mesitas de luz y se quedó parada al pié de la cama, esperándome. Sus manos recorrieron los costados de su cintura, subieron hasta su camisa y ...
    ... comenzó a desabrocharla, dejándola suelta sobre sus hombros y por afuera del pantalón, se lamí el labio superior con la punta de la lengua y sus ojos brillaban como nunca. Tras cerrar la puerta, y siempre mirándola, me dirigí al teléfono y pregunté que querían tomar (eso descolocó un poco M que pensó que iría a avalanzarme sobre ella y poco menos que violarla, pero al ratito me dijo), gaseosas, agua mineral y un champucito en frapé para que se vaya enfriando, iban marchando. Colgué el teléfono y me acerqué a la escalerita -de 3 escalones hacia arriba- que lleva al desnivel donde estaba M esperándome al pié de la cama. la imagen era realmente impresionante, vista desde abajo parecía altísima, el jean rasgado en las rodillas pegado a las piernas, con una notoria mancha de humedad en la entrepierna que oscurecía el color de la tela azul, camisa desabrochada por afuera del pantalón, y esos tacos que la elevaban varios centímetros más del piso. ojos achinaditos y brillantes y esa media sonrisa alucinante. Sus brazos a los costados del cuerpo y las manos en constante movimiento (las cerraba como apretando el puño y las abría). Una reina, una diosa, una provocativa mujer, una anhelante cómplice, una amante caliente. o todo eso junto. Me deshice de la camisa que traía puesta, los zapatos y las medias y subí la escalera despacio, con solo jeans puestos, disfrutando al máximo la mágica visión de M, que a cada paso que me acercaba se me hacía más hermosa y más real. Al subir y avanzar -muy ...
«12...8910...14»