1. Mi profesor me convirtió en su esclava (I)


    Fecha: 27/05/2018, Categorías: Infidelidad Autor: karen69, Fuente: CuentoRelatos

    ... respondí.
    
    -Bien, intenta probar que no fue así, te reto. Si piensas que el resto de tus compañeros te sirven de testigos, no servirá de nada, es la palabra de ellos contra la mía. Sé que tengo fama de ser un profesor muy exigente y muchos alumnos me detestan, sus palabras para apoyarte pueden ser tomadas como un intento de difamación en mi contra, solo para perjudicarme. Dime, ¿puedes, o no puedes probar que lo hice a propósito? –me replico con mucha seguridad en sí mismo. Lo peor de todo era que tenía razón, era imposible probar eso, más aún podría ser tomada la denuncia como un acto para joderle la vida, ya que el mismo ha sido víctima de ataques de alumnos molestos por su nivel de exigencia. Podría quedar absuelto de toda culpa y más aun con los contactos que muy seguramente debería de tener.
    
    -No… -dije bajando la mirada al piso con resignación, derrotada- no puedo probarlo.
    
    -Bien. Ya sabes, o aceptas disculparte o puedes retirarte de la universidad y perder todo tu esfuerzo, porque veras las clases conmigo, y te aseguro que no pasaras este semestre tampoco. –Me dijo. Yo sabía perfectamente que estaba jodida. No quería perder el esfuerzo.
    
    -Bien… Disculpe… por todo… -le dije, incomoda, resignada, mirando aun al piso.
    
    -¡Ja! –dijo.- ¿Piensas que con esa disculpa tan burda y sosa podrás compensar el bochorno que me hiciste pasar? No, niña, necesitas más que eso. Probemos con una disculpa pública y veremos si quedo satisfecho.
    
    -¿Una disculpa pública?
    
    -Sí, ...
    ... una disculpa pública. Puedes hacer una por escrito y publicarla en el primer número del próximo semestre del Ojo Universitario. –Dijo. “El Ojo Universitario” es un periódico semanal de la universidad que se le regala al estudiantado durante todos los semestres donde aparecen noticias de interés referentes a la institución.
    
    Se preguntaran porque no presente el caso por ese medio. Pues sencillamente porque Martin es uno de los principales colaboradores de dicha publicación. Acepte la propuesta y me retire del sitio.
    
    Durante el mes siguiente correspondiente al periodo vacacional pensé muchas cosas sobre este tipo y sobre el trato. No me gustaba la idea, pero no me quedaba de otra. Redacte la disculpa y al comenzar el siguiente semestre la misma salió publicada en el periódico. Paso una semana luego de la publicación, los compañeros de la uni me veían con mucha extrañeza por la disculpa y cuando los más cercanos me pedían explicaciones simplemente yo esquivaba el tema diciendo que me molestaba hablar de eso. Luego de unas tres clases con Martin, me cito en su despacho de coordinación. Me dirigí allí luego de la última clase del día y toque la puerta. Desde adentro me dijo que entrara.
    
    -¿Querías verme? –le pregunté. Él estaba de nuevo, sentado detrás del escritorio, el mismo aire de superioridad lo rodeaba, su rostro denotaba la misma prepotencia de siempre. Se encontraba leyendo el mismo libro de hacía un mes, lo recuerdo por el color negro de la tapa y la cinta marcadora ...
«1...345...14»