1. Quise empezar a tener sexo y que mejor que empezar en casa


    Fecha: 29/05/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Lila, Fuente: CuentoRelatos

    ... experta" me lo saqué de la boca y le dije que era mi primera vez, sólo que había visto cómo hacerlo en películas, que si quería comprobar que era puta me metiera su verga" y entonces él me tiro sobre el sofá y me abrió de piernas, se detuvo un momento como contemplando y dijo "vaya que estás húmeda, mi pequeña puta caliente" luego de decir eso empezó a mamar mi panochita, metía su lengua tan sabroso por mi raja, y con una mano masajeaba mi clítoris, fue tanto el placer que me vine rápidamente, se levantó y puso su rostro frente al mío para decirme que estaba tan sabrosa como mi madre, luego me beso y fue un sabor exquisito, mordió mi labio justo en el momento en que sentí la punta de su verga en mí, a pesar de que estaba tan mojada le costó trabajo meterla, pero después de 3 intentos, al cuarto la metió de golpe y sentí como si algo se rompiera y él se empezó a reír y me dijo; así que era cierto, soy el primero y de ahora en adelante ser el único, eres mi pequeña putita, entendiste?.
    
    Le respondí entre gemidos "ohhhhh siiii papito, soy tuya, pero por favor sigue dándome más y máaaaaas".
    
    El bombeaba tan rápido y yo sentía que iba al cielo y volvía, por fin comprendía porque gemía tanto mi madre, después de varios orgasmos él se vino en mi inundado mi interior, saco su polla y me dijo, vuelve a chuparla mi pequeña puta, anda toma la lechita que querías hace un rato. La chupe dejándosela limpia.
    
    Luego de eso de eso nos bañamos juntos y nos dábamos besos apasionados, al día siguiente mi padre le dijo a mi mamá que él me llevaría a la escuela, mi mamá da clases en la escuela donde va mi hermano pero yo iba a otra así que ese día no volví a ir a la escuela, nos fuimos a playa, mi padre metió el auto entre unos pinos enormes que había cerca de ahí para que nadie nos viera, así que cogimos en el auto, luego hablamos de que los días que le quedaban de descanso cogeríamos a escondidas cada que se pudiera.
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