1. Como inicié a mi mujer en el sexo anal


    Fecha: 07/12/2021, Categorías: Anal Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Mi mujer y yo nos conocimos después de cada uno finalizáramos nuestra relación estable. Cuando uno ya tiene algo de experiencia no tontea en exceso con el tema del sexo y toma decisiones rápidas así que enseguida nos acostamos y nos fuimos a vivir juntos. Los primeros polvos fueron distintos pues eran exploratorios, intentando cada uno saber cuáles eran los gustos del otro, cual es la posición que más nos gustaba, por ejemplo y así descubrí que ella disfrutaba a cuatro patas, en la postura del perro y ella descubrió como me gustaba que jugaran con mi culo metiendo algún dedo.
    
    Poco a poco fuimos conociéndonos mejor en todos los sentidos así que unas de las noches en la que jugábamos en la cama, Eva, que es como se llama mi mujer, empezó a meterme e dedo por el culo pues sabía que me gustaba.
    
    -Cariño sigue así, mientras ella me hacía una mamada, me metía el dedo en el culo y yo le comía el coño.
    
    -Pero que guarro eres me dijo.
    
    -De guarro nada que en el sexo todo vale.
    
    Yo en una ocasión le había preguntado si había practicado sexo anal y me dijo que nunca, que no le había llamado la atención y le daba algo de miedo. Yo le comenté que era un placer distinto siempre cuando uno lo hiciera libremente. No habíamos vuelto hablar del tema hasta que esa noche le propuse, sin esperanza, que lo intentáramos.
    
    -Eva no te gustaría probar, que yo jugará con tu culo, que te la metiera por el culo.
    
    -No lo sé, me da miedo que me hagas daño aunque viendo lo bien que te lo ...
    ... pasas, guarro, he pensado en pedírtelo en alguna ocasión pero no me decidía, me comenta tras dejar de chupármela y con su dedo aun metido en el culo.
    
    -Te prometo que si lo intentamos en cuanto tú digas lo dejo.
    
    Se quedó pensativa y no me contesto volviendo a chupármela, suavemente al principio, mordisqueándome los huevos, metiéndosela hasta el fondo de la garganta, hasta que no pude más y me corrí en su boca. Se tragó todo mi semen y se acurrucó a mi lado abrazándonos durante un rato.
    
    -Te atreves a intentarlo, me dijo al cabo de un rato.
    
    -Eres tú la que te tienes que atrever. Si lo hacemos es porqué a ti te apetece, no lo hagas por mí.
    
    -Adelante
    
    Entonces túmbate, déjate llevar y cuando tú digas yo me paro.
    
    Eva se tumbo de espaladas y cogí aceite para masaje de la mesilla y empecé a darle un masaje empezando por el cuello.
    
    -Relájate cariño, no hables, le decía mientras acariciaba su cuello, masajeaba su espalda metiendo mi mano por los lados acariciando sus tetas hasta llegar a sus pezones. Ella empezó a relajarse, a retorcerse siguiendo mis movimientos. Me acerqué a la raja de su culo y con mucho aceite empecé a pasarle mi mano por su raja, sin forzar, sin meter el dedo, pasando por encima finalizando en los labios de su coño escondido. A continuación me tumbe y empecé a comerle su coño recién depilado.
    
    -Pero no íbamos a hacerlo por el culo.
    
    -Relájate y déjame a mí.
    
    Seguí comiéndola el coño hasta que comprobé por sus gemidos que estaba excitada ...
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