Como inició todo con Ashley, mi alumna de preparatoria
Fecha: 15/01/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: rfoviedo, Fuente: CuentoRelatos
... hecho sentir esto. Me vuelves loca, que rico.
La levanté y la lleve a la cama dejando su cabeza colgando en el filo, así, ella boca arriba con la cabeza colgando le di a mamar nuevamente mi verga mientras yo me recosté sobre de ella para seguirle mamando su panocha. Así como estaba, Daniela me chupaba los huevos a su antojo. Nos giramos y quedamos en un rico 69 donde comencé a mamarle su culo mientras con mi dedo jugaba con su clítoris, lo que hizo que ella gritara de placer.
–Uy si, que rico, sigue así, así, así, sigue que me voy a venir de nuevo.
Era tanta su calentura que ella levantó mis piernas y comenzó a lamerme el culo, lo que hizo que viera estrellitas y me viniera a chorros en su cuello y espalda, al mismo tiempo que gritaba y se viniera como si estuviera orinando. Nos quedamos recostados extasiados. Daniela se limpió mi leche que había caído en su cuello y hombros y lo lamió.
–Que rica venida, nunca me había venido así. Nadie me había hecho sentir esto. Nadie me había dado una mamada en el culo, que rico, me dijo.
Yo sentía muy rico. La verga la tenía al máximo, muy hinchada y escurriendo. Sabía que me podía venir en cualquier momento. Ella se levantó y se dirigió a al tocador. Se puso de espaldas hincada sobre el banco del tocador e inclinándose hizo de lado su tanga que aún traía puesta dejándome ver sus dos hoyitos. Mirándome me hacía señas con su dedo para que fuera donde estaba ella. Me acerqué con la verga bien parada y le di una ...
... nalgada.
–Ouch que rico. Dame otra.
Le di otra nalgada más fuerte con la que Ashley paró más las nalgas.
Le daba una serie de nalgadas y con mi verga bien parada le sobaba donde la había pegado. Le embarraba mi verga por todas sus nalgas.
–Métemela papi, métemela por favor, ya no aguanto más.
Puse la hinchada cabeza de mi verga en la hendidura de su panocha y le di unos brochazos de arriba hacia abajo.
–Ahhh ya déjamela ir.
Se hacía para atrás queriéndose ensartar mi verga, pero yo retrocedía impidiéndole que la metiera. Le ponía la puntita y empujaba un poco.
–Ya no me hagas sufrir.
–Pídela, pídeme que te meta mi verga, pide ser cogida por mi chile.
–Por favor, cógeme con esa rica verga.
Cuando decía eso le dejé ir toda mi verga de un solo golpe hasta adentro. Ella solo reculo y levanto la cabeza.
–Uy si, que rica verga tienes.
La tomé de los cabellos jalándola hacía mi y comencé a bombearla fuertemente mientras le metía un dedo en el culo. Escuchaba como nuestros cuerpos chocaban generándose un rico sonido. Su panocha comenzó a escurrir sus jugos empapándome los huevos y mi pelvis. Que hermosa se veía mi verga entrando y saliendo de su rica papaya, mientras esta la llenaba de esos juguitos blancos. El olor que despedía su jugosa panocha era encantador. Del movimiento de mis bombeadas su tetas se movían de atrás hacia delante. Por momentos las tomaba con la mano que tenía libre, ya que con la otra le seguía jalando el cabello y las apretaba para ...