Seduje a mi suegra por meses, por fin se me hizo
Fecha: 20/02/2022,
Categorías:
Incesto
Autor: Alejandro1070, Fuente: CuentoRelatos
... cuando le di un lengüetazo a su clítoris, ella se retorció su cuerpo y soltó un gemido de placer, fui llenándome más de su vagina en mi boca y comencé a meterle los dedos lentamente a su vagina entonces ella dijo:
Ella: No no me los metas (sin oponer mayor resistencia)
Mis dedos terminaron al fondo de su concha e} de un golpe, comencé con el mete saca de dedos mientras me comía su clítoris, con la otra mano comencé a acariciar su pechos que siempre había quería tocar, comenzaba a subir de intensidad sus movimientos de cadera, apretaba más sus hermosos labios vaginales con mis dedos así estuvimos unos 10 minutos cuando comencé a tocar mi pene ella ya estaba muy excitada sus gemidos eran casi gritos, se levantó de la posición en la que estaba y me preguntó:
Ella: que bien lo haces, déjame devolverte el favor va? Solo un poco si no te molesta.
Con la cabeza dije que no y me acostó boca arriba, comenzó a quitarme el pantalón hasta que me saco la verga, me tomo mi pene y comenzó a chuparlo de una forma deliciosa que casi me saca le leche, yo estaba impresionado y muy excitado pero no podía perder tan esperada oportunidad eyaculando prematuramente así que me dejé llevar por el placer y la tomar de la cabeza con su pelo la jalé e hice que toda mi verga entrara en su boca, hasta adentro por unos segundos hasta que ya no aguantó más la respiración y la sacó de su boca, me puse de píe y ella quedó acostada boca abajo en la cama por lo que fui al otro lado de la cama y con ...
... un movimiento bruco le pedí que se pusiera boca arriba…
Ella: Que vas a hacer (mientras se tocaba su clítoris) que estás haciendo, ya nos pasamos de la raya, tenemos que parar…
Sin responderle nada, la jale de las piernas y se las abrí, preparándome para meterle la verga…
Ella: Nooo no me la metas eso no dijimos, no.
Yo: Solo un poco, ni modo de quedarnos así a la mitad de todo…
Ella: nooo no me cojas esto está mal (ella tenía los ojos cerrados y se retorcía del placer).
Me puse sus piernas en mi cuerpo y le acerque mi pene a la entrada de su vagina, le comencé a masajear el clítoris con mi cabeza, mientras ella me pedía que no lo hiciera sin ofrecer ninguna resistencia, de un golpe se la metí y ella dio un gemido como quedándose sin aire, ya adentro lo deje unos segundos adentro y comencé a masturbar su clítoris a lo que ella solo se retorció, ya estaba muy excitada y nada nos iba a parar, le pregunte:
Yo: Como quieres que te lo haga?
Ella: Así así, ya me calentaste, cógeme rápido…
Comencé a cogerla primero despacio y fui subiendo el ritmo hasta que se lo estaba haciendo muy duro y ella comenzó a gemir más fuerte, sus gritos eran muy excitantes, después de un tiempo la voltee y sabíamos que seguía el perrito, ella me pidió que no termina, que aguantara pero la verdad es que a mí ya se me salían, por un momento pensé en preguntarle “¿Dónde te los echo?” pero para aguantar más se la saque y le dije que fuéramos a la sala para que se asomara por la ...