Una salida al aire libre
Fecha: 05/04/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: AlexanderCC, Fuente: CuentoRelatos
... gimiendo, no tan fuerte obviamente, aguantando por el entorno... esto último hacía que me calentara más y más, todo mejoro cuando le empecé a comer su clítoris, la empecé a dedear al mismo tiempo que se la chupaba, levantando mis dedos y ella solo atinaba a taparse la boca con las dos manos.
Estuvimos un buen rato así hasta que le dije que se pusiera en cuatro, en ese momento quería hacerle una anal, por lo caliente y duro que estaba, por lo que intenté meterla y no pude porque estaba muy apretada, puse saliva y un poco de su fluido en mis dedos masajeando su ano y no pasó nada al volver a intentar meterlo, por lo que decidí a hacer algo que nunca había hecho antes en mi vida sexual, que fue hacerle el famoso beso negro o sexo oral anal, cuando le pasé mi lengua sentí un gemido distinto a los otros, era más profundo quizás, le abrí los cachetes del culo y empecé a pasar mi lengua (de manera improvisada por la nula experiencia) hasta el punto que le metía la lengua y uff ese sabor distinto que tenía era hermoso, estaba más excitado que nunca y ella también, le empecé meter dos dedos y entraba fácilmente, por lo que decidí meter mi pene y entro todo sin problemas, se lo empecé a sacar y meter de manera rápida mientras tomaba su cintura (de manera incomoda por cierto por la carpa) le daba nalgueadas, lo suficientemente fuerte para que le doliera y no se escuchara tanto, le tiraba el pelo y rajuñaba la espalda, escuchaba sus gemidos y escuchaba como mi pene entraba en su ano ...
... de manera fácil, incluso se escuchaba como si fuera su vagina por lo mojada que estaba, fue una sensación única en el momento, no cambiamos de posición, seguimos así un buen rato hasta que me quería ir y obviamente deposité todo mi semen dentro de su ano sin antes ella soltar un gemido al sentir mi semen en su culo.
Descansamos un rato y yo seguía duro, así que le dije que se subiera, me empezó a montar y puta que lo hacía bien, se movía muy rico y al estar arriba me daba la posibilidad de apretar sus pechos, le daba nalgadas y apretaba su culo, de igual forma masajeaba su ano que ya estaba húmedo pero sin meterle un dedo, le encantaba esa sensación y cabalgaba más rápido, le dije que cambiáramos de posición de patitas al hombro y empezamos de nuevo, ella era bien elástica en ese sentido por lo que podía estar metiéndosela, mientras tenía sus piernas en mi hombro y le comía la boca, el cuello o sus pechos, seguíamos ambos muy excitado por lo que otra vez me dieron ganas de acabar y le dije, obviamente no quería acabar en su vagina así que le dije que se lo tragara, ni tan desobediente me dijo que si, así que me recosté y ella de inmediato me la empezó a chupar hasta tragarse la leche que me quedaba. Volvimos a recostarnos y aún ebrios le dije que estuvo todo rico al mismo tiempo que tomaba sus pechos.
Decidimos terminar ahí y dormir porque al otro día había que levantarse temprano, desconozco el tiempo que estuvimos haciendo todo, pero fue un tiro largo.
Espero que ...