1. DOS OVEJAS ME HICIERON DESFOGAR DOS MESES DE INACTIVIDAD


    Fecha: 05/06/2018, Categorías: Zoofilia Autor: Anónimo, Fuente: SexoSinTabues

    ... acerqué mi boca a su vulva metiendo mi lengua (ya son cuatro especies: becerra, burra, cerda y oveja, se preguntarán a que sabe? Casi igual en todas, sabor fuerte como a queso, un poco salado y a algo de carne cruda) habiendo degustando su vulva, satisfecho por lo que había hecho, me acomodé nuevamente en sus ancas reiniciando las penetradas, de vez en cuando soltada ruidos fuertes y excitantes, para entonces notaba que el animal estaba fatigado así que aceleré las clavadas produciendo que no aguantara más, se lo mande hasta el fondo soltando una cantidad de chorros acumulados durante este tiempo, esa primera contracción me hizo literalmente pegar un grito de placer, luego la otra y sucesivamente hasta que fueron tornándose sutiles, abrase por la pansa a mi oveja y me quedé un rato sobre ella, mi verga se tornaba flácida y podía palpar que le había llenado de leche su incomparable caverna, saque mi verga de la oveja y me puse de pie, le oriente las ancas hacia la luz para ver como salía leche por montones. Como estaba haciendo calor en una cubeta eche agua y melaza la revolví y les puse de beber a ambas ovejas, las dejé encerradas con la luz encendida, regresé a mi habitación me recosté desnudo sobre la cama quedándome entredormido, a las 11 de la noche me desperté, al ver hacia abajo mi verga estaba completamente erecta pidiendo más carne, recuperado el libido me fui donde tenía encerradas mis ovejas, al entrar se pusieron de pie sin tantos preámbulos amarre al estante la ...
    ... misma oveja y me ubiqué nuevamente en sus ancas quedando lo más cómodo posible, acomode la cabeza de mi verga en la entrada de su vulva, no fue sino tocarla y se me puso completamente dura, ya ubicado sobre y atrás de las ancas de la oveja hice algo de fuerza y quedó totalmente clavada, podía sentir demasiado húmedo por dentro, pues aún estaba toda babosa la vulva por mi anterior y abundante eyaculación, con la verga hasta lo más profundo, comencé a meter y sacar, regresaron nuevamente las dulces sensaciones, sentía como mi abdomen se trancaba contra sus ancas, sentía sus lanudas piernas entre las mías, sentía mi verga entrar y salir aceleré el mete y saca, duraría unos diez minutos culiando como si fuera la última vez, cuando no aguante más volví nuevamente a desocupar mi contenido en sus profundidades, pasados todos los espasmos eyaculatorios saqué mi verga flácida y enrojecida, solté a la oveja apague la luz y me regresé a la habitación para descansar, de regreso era casi la media noche, puse el despertador a las cuatro de la mañana para disfrutar de mi oveja nuevamente. A las 4 de la mañana regresé donde estaban mis ovejas, una de ellas al abrir la puerta casi se sale, la eche hacia adentro cerré la puerta y prendí la luz, mi hermosa y lanuda compañera se notaba que estaba cansada pues siguió acostada, sin más agarre a la otra y la ate al mismo estante, me puse a manosear su vulva e inmediatamente se puso inquieta, me le recosté para cansarla e la medida que le daba dedo ...