Mi joven esposa, mi amiga, mi amante, mi puta (Parte 2)
Fecha: 02/05/2022,
Categorías:
Intercambios
Autor: los2kalientes, Fuente: CuentoRelatos
Inmediatamente Marco llamó al celular de su mujer...
-Amor, te esperamos... si... si todo está acordado... le encantas y se muere de deseos por estar contigo... lo sé amor... tranquila todo está bien yo solo quiero verte feliz y disfrutando...
Pasaron algunos minutos que me parecieron una eternidad lapso en el que no comentamos nada entre nosotros, ambos volteábamos instintivamente a ver la ruta por donde vendría su mujer... de pronto entre la gente apareció Lety caminando sensualmente, se notaba más maquillada, sus labios rojísimos y el entorno de sus ojos más acentuados, llegó, se sentó besando amorosamente a su esposo y cruzando sus poderosas piernas, me obsequio una mirada profunda y coqueta que me dejo helado, para mi a estas alturas Lety era un manjar, la excitación me ahogaba...
-Nos vamos amor? -Lety se levantó mirándonos alternadamente, acomodándose el vestido y tomando su bolso, esperando que nos incorporáramos para salir de ese lugar.
Marco, con toda calma colocó y acomodó el abrigo sobre su esposa al mismo tiempo que algo le hablaba al oído y le daba un ligero masaje de hombros, Lety me miraba coqueteándome con descaro y dueña de la situación, su mirada me derretía... era extremadamente sexual, algo que rebasaba los límites de lo que alguna vez había experimentado, sin siquiera intimar tenía una total erección que para mi era incontrolable, deseaba lanzarme sobre ella y poseerla ahí mismo!
Salimos del antro no sin antes pedir el resto de la botella ...
... dirigiéndonos en silencio al estacionamiento, silencio sordo solo interrumpido por el sonido de la lluvia y el fuerte taconeo de las zapatillas altas de Lety, la pareja me seguía cariñosamente abrazados, llegamos al auto, se subieron a la parte trasera aun besándose mientras yo me colocaba frente al volante.
-A donde nos dirigimos? -pregunté con voz ahogada por la excitación.
-Nuestro hotel está a unas calles de aquí David, Mesón de Santa Rosa -Me respondió con voz ronca Marco.
-Muy bien no estamos muy lejos -Me dirigí de inmediato.
Llegamos 20 minutos después a un hotel colonial de buen gusto por el que había pasado infinidad de veces camino a mi oficina pero en el que jamás había entrado. Cuando me estacione me asalto la duda si no sería extraño entrar junto a la pareja...
-Una pregunta, al parecer es un hotel muy exclusivo, no tendré algún impedimento en entrar a su habitación?
-No lo creo David, rentamos una suite double bed es de suponer que esperamos visitas, no te preocupes -Me contesto Marco al tiempo que ayudaba a su mujer a salir del auto.
Entramos al hotel, Marco de inmediato se dirigió a la recepción y charlo entre risas con una de las recepcionistas en turno, Lety y yo nos sentamos en una especie de salita a esperar a su esposo, ella enfrente de mí, cruzando sus hermosas y bien torneadas piernas, mirándome evasiva con una sonrisa entre angelical y diabólica. No había caído en cuenta que no nos habíamos dirigido la palabra en todo el trayecto ...