1. Mi antigua vecina. Toda una sorpresa.


    Fecha: 07/06/2018, Categorías: Sexo con Maduras Autor: calent1964, Fuente: xHamster

    ... sabía que hacer, pero llevaba ya una erección que se me salía. Ella me dijo que la cogiera en brazos y la llevase a su dormitorio, que le apetecía que la llevase así y sin pensarlo lo hice. Fuimos a su habitación y la tiré en la cama. Ella me empezó a desnudar deprisa y cuando vio mi polla empinada se tiró a mamarmela como una loca. Follamos durante las dos horas que estuvimos solos. Y me contó que me había visto espiándola por mi ventana y que le hacía mucha gracia que un crio como yo lo hiciera. Así estuvimos un par de años, hasta que me casé y me fui a otro barrio. Dejamos de vernos, salvo cuando yo visitaba a mis padres, aunque ya no hicimos nada.Han pasado de eso 28 años. Y no hace mucho, tomando un café en un bar del barrio al que fui por trabajo, la vi pasar con sus nietos. Sabía que su marido había fallecido hace un par de años y que ya tenía tres nietos. Lo sorprendente es que estaba casi igual que antes. Ahora tiene 64 años, pero sigue teniendo unas tetas que vuelven loco. Estuve en el bar un rato más y al salir volví a verla pasar. Sin cortarme la alcancé y por detrás la cogí del hombro para gastarle una broma. Se giró asustada y al verme se empezó a reír. Le di dos besos y le pregunté por como estaba. Nos pusimos a charlar un poquito y le dije si quería tomar un café conmigo, que la invitaba. Me dijo que si, pero que invitaba ella en su casa, que estaba esperando que la llamasen del centro de salud y tenía que estar allí. Y nos fuimos a su casa. Al entrar me ...
    ... vinieron todos los recuerdos de aquellos días en los que vivía allí. Me dijo que hiciera el café en la cafetera que tenía en la cocina que iba a cambiarse de ropa. Cuando volvió le comenté medio en broma que pensaba que iba a salir con la bata como aquella vez. Pues aún la tengo, pero ya no tengo el cuerpo para salir con ella. Le dije que era una tontería, que estaba estupenda para su edad. Tu crees? me preguntó. Desde que faltó su marido se había dejado un poco, me dijo. Pues arréglate, que aún estás para espiarte por la ventana, le dije. Ella empezó a reír diciéndome que necesitaba hacerlo, ya que la enfermedad de su marido había sido dura y desde entonces había estado triste. Yo aproveché y fui echando leña al fuego. Estás estupenda. Y seguro que algún hombre bebe los vientos por ti. No se quien se va a fijar en mi, respondió. Pues ahora mismo el que tienes delante está deseando follarte. Pero si tengo 64 años, me dijo. Y que?. Estás para mojar pan. Ella se fue poniendo alegre con mis piropos, y yo, ni corto ni perezoso le dije que la iba a coger en brazos y a llevarla a su dormitorio, como la primera vez. Ella dudó mirando el reloj y yo sin más me abalancé, la cogí en volandas y la llevé a su cama. La desnudé mientras la besaba en la boca. Cuando le quité el sujetador y saltaron sus tetas comencé a chuparlas como un loco. Las tenía más grandes aún!. Me puse en pie y me desnudé yo. Llevaba la polla tiesa y dura y ella me la cogió llevándosela a la boca. Empezó a mamarmela y yo ...