Cuando te reclutan, cualquier hueco es trinchera
Fecha: 26/05/2022,
Categorías:
No Consentido
Autor: ALEJOGOMEZ6991, Fuente: CuentoRelatos
A regañadientes y de camino hacia el batallón reclutado para el servicio militar y asignado al Pelotón No. 4 del Cuerpo de Infantería, miraba por la ventana del bus despidiéndome de una vida desordenada y placentera, yo un joven de raza negra delgado y con un cabello afro que pronto perdería por un corte militar solo pensaba si sería capaz de someterme a las órdenes, a la disciplina y madrugar.
Pero era mirar alrededor y todos los que íbamos en ese bus ninguno que estaba saltando de alegría por reclutarse e inclusive los voluntarios que con tristeza se despedían de sus familias o novias que posiblemente solo en unos meses volveríamos a ver. Ya de camino para el batallón que estaba ubicado en un sitio cálido, se sentó en la silla del al lado Benítez un joven del interior del país, blanco este como la mayoría de los reclutados que aburrido como yo me decía;
Benítez: Cuando volveremos a beber una cerveza? Cuando veremos a la familia?
Yo: Quién sabe? Pero pasara unos días o meses…
Benítez: Y el sexo?
Yo: Ahí si… Y ni revistas porno! Jajaja
Así entablamos una conversación con Benítez que hizo ameno el viaje, pero llegamos al Batallón y de inmediato nos hicieron formar para darnos la bienvenida, que de bienvenida poco porque empezaron las órdenes las reglas y las privaciones, quitándonos los teléfonos luego vino el corte de cabello donde mi afro frondoso termino en nada y por último el cambio de vestimenta por el uniforme camuflado lo que nos indicó que ya no ...
... éramos civiles sino éramos el soldados por lo que ahora era el soldado Ramírez y mi nuevo amigo era el soldado Benítez.
Al día siguiente el pelotón No. 4 se nos ordenó formar a las cuatrocientas horas donde nos reasignaron nuestros comandantes e instructores de la base militar el primero en presentarse fue el Sargento Martínez un hombre de realmente intimidante por su tamaño con sus 1,96 cm y su voz firme gruesa, nos indicaba que sería el encargado de prevalecer la disciplina en el pelotón. Luego se presentó la Subteniente Rojas una mujer que nos impactó a todos por su esbelta figura acuerpada ella, de tés blanca, 1,74 cm y con un hermosa cabellera pelirroja quien se encargaría de instruirnos en lo táctico y físico, junto al Capitán Torres líder del pelotón, esa sería la cadena de mando más cercana pero también estaba obviamente en la base más superiores como el coronel Romero y el comandante de la bese mi General Giraldo.
Luego no tardaron las ordenes y los deberes sin darnos espacio al ocio, haciendo que día se pasara volando y solo hasta las mil novecientas horas nos permitieron descansar en los catres apagando las luces, sin embargo se escuchaban murmullos de mis compañeros comentando la experiencia del primer día, pero el tema más recurrente fue la subteniente Rojas evidentemente fue un estimulante para soportar tanta orden y como decía Benítez:
Benítez: Con mi subteniente Rojas solo es que mande y yo se lo mando jajaja.
Ramírez: Da placer decirle MI subteniente ...