Vi a mi esposa con otro
Fecha: 31/05/2022,
Categorías:
No Consentido
Autor: juancaballero, Fuente: CuentoRelatos
Por más que he insistido nunca he logrado que mi esposa acepte estar con otro hombre. Yo moría por ver a alguien más dándole por esa cuquita, disfrutando sus deliciosas y redondas nalgas que tanto llaman la atención y además poder oír los gemidos que siempre da mientras se viene pero producidos por una persona que no fuera yo, pero no he tenido éxito. Sólo logré que aceptara le tomara algunas fotos desnuda para poder mirarlas cuando estuviera de viaje fuera de casa.
Formé un pequeño álbum con varias fotos. Hace unas semanas en un viaje de trabajo con Rogelio mi mejor amigo, y ya entrados en copas salió el tema de las fantasías sexuales. Rogelio es muy caliente, se ha divorciado dos veces y se acuesta todo el tiempo con mujeres nuevas y yo le dije, te aseguro que ninguna de tus viejas tiene unas nalgas como las de mi mujer. Rogelio aprovechando la confianza me dijo, que era cierto, que la verdad mi mujer estaba muy buena, y que se veía que tenía unas nalgas bastante buenas. Yo le dije que sin ropa eran aún más lindas y envalentonado saque mi portátil y busque mi álbum y se lo enseñe.
Me gustó mucho ver el brillo en sus ojos mientras veía las diferentes fotos de mi rica esposa desnuda. ‘¿Te gusta?’ le pregunte, y él dijo que claro, que estaba riquísima. Yo le conté mi fantasía y le propuse intentar hacerla realidad e hicimos un plan para el siguiente sábado. Yo arreglé que mis hijos no estuvieran y le propuse a mi esposa tener una cena íntima en casa. Preparó algunos ...
... pasabocas y yo abrí una de roncito (que siempre se le sube a la cabeza y la desinhibe bastante), después de varias copas y conversación un poco morbosa y caricias por todas partes y ya cuando estaba un poco mareada le dije que se fuera a acostar y que me esperará en la cama que yo ya iba en un momentico.
Mientras ella se fue a acostar y después de que paso como media hora llame al celular de Rogelio que ya esperaba afuera de la casa y le dije que entrará. Subimos en silencio y dejé a Rogelio afuerita de la habitación esperando. Yo bien caliente entre al cuarto y encontré a mi esposa adormilada y vestida solo con la tanguita que se le metía victoriosa por medio de sus lindas nalgas entonces me subí a la cama y empecé a acariciarla y besarla ella respondió a las caricias con bastante calentura y riéndose de lo borrachita que estaba, yo le metí los dedos en la vagina para irla preparando y saber si estaba bien lubricada, después le bese su cuquita por largo rato, como a ella le gusta y vi cómo se retorcía de placer, hasta que me dijo ven, métemelo.
Le dije que tenía que ir al baño y que esperara, apague la luz y salí. Entonces entro Rogelio, con una erección que me dejo sorprendido pues nunca le había visto la polla, que ciertamente era más grande y gruesa que la mía, yo me senté en una silla que tenemos para poder oír y espiar desde ahí. Rogelio se subió a la cama y todo el tiempo sin hablar se acercó a mi mujer que estaba todavía bocabajo y que ya estaba más que lista. Le ...