Nunca imaginé ser la puta de sus amigos
Fecha: 12/07/2022,
Categorías:
Transexuales
Autor: Casado_closetMx, Fuente: CuentoRelatos
Cierto miércoles decidí pasar tres días vestida de nena, la primavera había llegado y no contenía las ganas de hacerlo, era la oportunidad perfecta para comenzar a ser yo misma. En cuanto se fueron mi roomies de vacaciones a sus lugares de origen, corrí a mi cuarto y saqué todas mis prendas, mis accesorios y mis zapatos; ese miércoles era muy temprano en la mañana, prácticamente tendía hasta el sábado.
Las horas pasaron, modelé ante mi cámara las cantidades más posibles de ropa que tenía guardada, medias, ligueros, tacones, blusas, vestidos, faldas, accesorios, aretes, de todo. Después de depilarme todita, el área del bikini, las piernas y las cejas, de eliminar imperfecciones, de pintarme las uñas y de quedarme en un short muy corto, con una blusa rosa de encaje y unos tacones abiertos, me dispuse a prepararme de comer algo muy ligero.
Como mi complexión es muy delgada, mi piel es blanca, mi cuerpo es muy femenino, mi espalda está llena de pecas y mis hermosas nalgas, no pude evitar pasar horas frente al espejo. Al caer la tarde, decidí ponerme en contacto con algunos de los hombres que me habían escrito, a partir de los anuncios que puse aquí en un sitio de contactos, además tenía muchos correos de amigos que me conocían como Vane y me había comenzado a escribir con varios, aunque debo aceptar que los que son muy jóvenes no me encantan, prefiero a los hombres maduros.
Al momento, recibí muchos halagos referentes a mi belleza en la foto, entonces un hombre me ...
... comenzó a hacer la charla en el chat, era de 36 años, de nombre Rubén y su charla me agradó, comenzamos a las 6:00 p.m. y cuando vi eran las 8:00 p.m., él me preguntó si me podría conocer. Pasaría por mí a las 11:00 p.m., eso me daba tiempo para maquillarme y cambiarme de ropa pero le advertí que no me interesaba tener sexo y él lo aceptó. Decidí ponerme una falda ligera, tableada, unas medias en red color piel, unos tacones altos rosas y una blusa rosa con negro con transparencias, me veía hermosa, además me solté el cabello que me llegaba debajo de los hombros.
Él llegó con cinco minutos de retraso y al asomarme por la ventana, lo vi en su camioneta, linda por cierto pero al entrar a su auto, Rubén se quedó perplejo, vi que su boca quedaba abierta mientras tímidamente comenzaba a saludarme “hola, Vane”. Al darme cuenta de esto y como toda mujer, dominé la situación y le di mi mano, acercándome a darle un beso en la mejilla, viéndolo como cerró sus ojos cuando olía mi perfume y me dijo “vamos a mi casa, veremos una película”. Me comenzó a excitar, era muy atractivo, era alto, medía más que yo con tacones, algo como 1.85 m o más de estatura, era robusto, de piel bronceada, con barba y muy velludo, su voz era gruesa y sus hombros muy varoniles, con sus manos gruesas, también olía muy rico y vestía muy bien.
Al ver que seguía tímido por ser su primera vez que salía con una travestí, le pedí que se relajara y cuando llegamos a su casa, subí las escaleras pero fingí tropezarme, ...