Lara y la dependienta de la zapatería
Fecha: 15/07/2022,
Categorías:
Fetichismo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... ¿Sólo mis pies?
- No queremos nada más…
- Pero tengo cosquillas…
- Lo haremos bien…
- ¿Me da los 40 euros?
- Toma – Lara abrió su monedero y le dio el dinero.
- Venga vale, pero sólo diez minutos…
Fuimos hasta el último banco de la tienda, una hilera de cajas nos tapaba de las mirada externas. Eva se sentó en un banco. Lara y yo nos arrodillamos delante de ella. Yo no sabía por donde comenzar, giré la cabeza y vi como Lara sujetaba el pie izquierdo de Eva y lamía lentamente aún con las zapatillas puestas todo el contorno del talón. Yo estaba a punto de correrme, cogí con delicadeza el pie derecho de Eva por el talón y lo acerqué lentamente hasta mi cara. Era muy suave. Retiré poco a poco la zapatilla y un agradable aroma llegó hasta mi olfato. Olí entre sus dedos, y saqué la lengua hasta llegar a tocarlos. Eva no tenía pinta de estar pasándolo mal. Introduje su dedo gordo en mi boca y succioné, mientras le pasaba la lengua en círculos. Lara ya tenía todo el pie dentro de su boca. Eva se tiró un poco más atrás para subir sus piernas, creo que le estaba gustando. Levanté su pie y lamí toda su planta, desde los dedos hasta el talón.
Entonces, Lara acercó su mano hasta mi paquete y comenzó a masajearme por encima del pantalón. Eva me miraba de forma inequívocamente lasciva, definitivamente le gustaba lo que le estábamos haciendo. Sus mejillas se habían ruborizado y unas pequeñas gotas de sudor emergían por su frente.
Yo quise corresponder a Lara, ...
... acerqué mi mano hasta su muslo y comencé un suave y delicado masaje por su interior encima de las medias, de tanto en tanto le daba unos pequeños golpecitos a su coñito, esto hacía que diera respingos de placer.
- ¿te gusta Eva? – preguntó Lara.
- Si…
Fue un si de excitación, como si no quisiera que paráramos, Lara decidió ir un poco más allá y con una habilidad remarcable, bajó mi cremallera e izo salir mi verga que saltó como un resorte hacia arriba. Entonces comenzó a masturbarme delicadamente. Eva no apartaba la mirada de mi polla. Yo seguía degustando ese maravilloso pie, mientras ya estaba acariciando toda la parte vaginal de Lara. Mi polla no iba a durar mucho, y Lara lo sabía, por eso hacía pequeñas paradas mientras me pajeaba, era toda una experta en hacerme aguantar. Desde mi posición podía ver las braguitas de Eva por debajo la falda, y estaban bastante mojadas, ella se reprimía en tocarse supongo que por vergüenza, pero seguro que tenía muchas ganas de hacerlo. Mi mano removía rápidamente en la zona del clítoris de Lara, ella gemía, creo que estaba a punto del orgasmo sus medias estaban empapadas por el flujo vaginal, aceleré el movimiento y efectivamente, Lara lanzó un gemido y tuvo un orgasmo. Yo seguí con el pie de Eva. Lara apartó el pie de su cara y me lo ofreció a mí. Sujeté los dos pies y los lamí por completó, mordisqueé sus talones y me pareció escuchar algún gemido proveniente de Eva. Lara se colocó detrás de mí y comenzó ahora sí a masturbarme con ...