El placer de ver a una mujer teniendo un orgasmo
Fecha: 27/07/2022,
Categorías:
Hetero
Autor: Athosog, Fuente: CuentoRelatos
Estando en la universidad me tocó estar en la casa de una amiga con su madre y hermana presentes debido a que la casa era algo grande y que habían tenido visitas logré estar a solas con mi amiga, no podíamos encerrarnos en el cuarto porque sería muy evidente, pero por alguna extraña razón pensamos en meternos al baño si alguien se acercaba simplemente contestaría que estaba ocupado y que tardaría un rato en salir, pero por suerte no llegó ese momento.
Entramos al baño y empezamos a besarnos ya para ese tiempo ya tenía un poco de practica en cómo besar los pechos de manera efectiva y hacer un sexo oral que si bien no era muy bueno tampoco era malo. A decir verdad no hice nada distinto que en otras ocasiones ya hubiese hecho.
Ella llevaba un pantalón ajustado y una blusa ligera. Empecé a besar su cuello mientras ella me decía que no podíamos hacerlo porque estaba su familia y conocidos pero por lo general no me gusta escuchar sus palabras cuando estoy besando a una chica, por lo general escucho más su respiración, sus suspiros y leves gemidos que salen de su boca (es como música para mis oídos), así que continúe besándola, alce su blusa y empecé a besar sus pechos a morderlos, me centre en sus pezones, empecé a lamer sus pechos como sus pezones de abajo hacia arriba, succionándolos con la boca, mordiendo ligeramente sus pezones, no nos quitamos del todo la ropa y para ser sinceros lo que yo quería era que disfrutara.
Entonces fui bajando poco a poco besando su ...
... abdomen hasta llegar a su pantalón para poder desabotonarlo y bajarlo a mediación de las piernas. Como tenía una tanga muy diminuta no me fue difícil hacerla a un lado y empezar a besarle la entrepierna pasando mi lengua repetidas veces hasta que empecé a escuchar la aceleración de su respiración que reflejaban el grado de excitación comencé a lamer su clítoris con movimientos lentos de arriba hacia abajo, mientras que mis manos acariciaban sus nalgas, mis movimientos eran los mismo que en otras ocasiones había hecho no había nada fuera de lo normal excepto la pequeña excepción de que alguien nos podía descubrir, cualquier conocido de ella pudo haber ido al baño y descubrirnos.
Seguí lamiendo de forma más rápida y alternaba besando su entrepierna, mientras que con una de mis manos acariciaba uno de sus pechos y apretando ligeramente su pezón, de tal manera como si hiciera una bolita con un papel, de repente jalaba y apretaba con un poco de fuerza su pezón. En menos de diez minutos realizándole un poco de sexo oral y acariciando con mis manos su cuerpo, ella empezó a gemir de una manera más intensa, agarro mi cabello con sus manos y presiono mi cabeza hacia ella como si quisiese que le diera más.
Sus piernas se abrieron más tratando de obtener una mayor estimulación por parte mía. Yo por mi parte seguí moviendo mi lengua y apretando su pezón, sus ligeros gemidos forzados a no ser más ruido del que hacían eran controlados con una de su mano, mordiéndosela para evitar ser ...