Campamento con mi tímida novia ¿sale mal o bien? (Parte 4)
Fecha: 14/08/2022,
Categorías:
Fetichismo
Autor: Homelander, Fuente: CuentoRelatos
... ponían a lo suyo de nuevo. Se acariciaban y besaban apasionadamente. El de pronto se puso de pie y la llevaba a la orilla del jardín, yo estaba por seguirlos y él me dijo "espera" indicándome que me quedara ahí, ella lo siguió, tomados de la mano, platicaron 30 segundos y volvían.
"Que sucede?" Pregunté curiosamente, pero ellos me ignoraron y siguieron besándose y tocándose de pie frente a mí. Ella acariciaba la vara de Randal que comenzaba a ponerse erecta de nuevo. El volteó hacia mi y me dijo firmemente "acuéstate" yo me quedé un segundo pensando porque quería eso y para que, el repitió "acuéstate boca arriba" me acosté torpemente en el suelo esperando que sucedería, él tomaba a mi novia y la colocaba en cuatro patas encima de mi, cara a cara.
Ella me veía pero la situación era jodidamente incómoda, así que intentábamos no vernos a los ojos, ella gimió un poco, miré debajo entre sus piernas y podía ver la lengua retorcerse obsesivamente en el coño de mi novia, ella se retorcía tímidamente sin dejar de verme a los ojos ahora, podía escuchar los obscenos húmedos sonidos de la lengua y saliva de Randal tronando sobre el coño de mi novia. La lengua de Randal desaparecía y podía ver su barbilla, ella se retorcía un poco.
Alejandra: me está comiendo el culo – me decía cachondamente viéndome a los ojos
Yo: ¿te gusta? – pregunté tímidamente con la verga dura.
Alejandra: mucho – decía entre gemidos y empujando su culo contra la cara de Randal.
Él se levantaba, ...
... podía ver por el arco que formaban las piernas de mi novia sus enormes bolas colgando y su orgullosa enorme verga erecta posicionándose sobre contra su lindo coño. Volteé a verla nerviosamente, ella me veía también y tenía la misma cara.
Alejandra: perdón… - me dijo de manera triste viéndome a los ojos.
Yo: está bien ok te amo – dije débilmente, ella me besó, pero no respondió.
Randal esperó, o solo fue un timing perfecto, pero ella se separaba de mí y ella apretaba los dientes fuertemente, el gemía profundamente y ella se movía por la embestida de él. Randal comenzó a tomar ritmo, ella me veía y hacia esos ruidos a los que no acababa de acostumbrarme, tan guturales, tan primitivos, quejidos de dolor y placer, su cara se retorcía y ella me veía casi con lastima. El gemía profundamente y la llamaba zorra, ella solo gemía, hundió su cara en el pasto y rindió sus tetas contra mi pecho, pude ver la cara de el por encima del hombro de ella, el veía su lindo trasero atentamente y de vez en cuando me miraba gimiendo sin vergüenza. “El coño de tu novia me encanta” me dijo sonriendo y clavando toda su verga en ella, ella gritó histéricamente en mi oído.
Él se levantaba un poco, se ponía en cuclillas para penetrarla más profundamente, ella me volvía a ver.
Alejandra: perdón, pero él me gusta mucho… - me decía con la voz quebrada besándome dulcemente, él le clavaba la verga de golpe quedándose dentro de ella y ella gemía como histérica.
Yo: no te preocupes, te amo – le ...