1. Mi follada inicial con perros


    Fecha: 13/06/2018, Categorías: Zoofilia Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... entraba excitándome cada ves mas. Al rato de estar en eso Oso se puso algo inquieto y se tiro al suelo., yo estaba tan ebrio que me quede ahí un rato, El perro daba vueltas feliz y su pene se hizo pequeño hasta quedar de nuevo cubierto por el forrito de pelos. Me saque el pepino y quería llegar hasta el final de esto con Oso pero jamas me habían penetrado y me nos un perro, asi que no sabia como empezar. Se me vino a la mente de cuatro patas como es normal entonces me puse en el centro de la sala de cuatro patas sacando trasero y Oso solito como entendiendo lo que pasaba se me tiro encima de inmediato y con sus deliciosos movimientos pélvicos pasaba su pene por todo mi culito rápidamente buscando el escondite que le iba a dar su máximo placer y anhelo. Sentía como los pequeños chorritos se semen caliente mojaban mis nalgas y mi ano has ta que me dio la cabeza y con mi mano guie su pene hasta el centro del placer. Me la metio varias veces pero se bajo y comenzó a lamerme el culito y eso la verdad es una de las cosas en sexo que descubrí que me gustan mas. Después de una mamada de culito intento otra ves montarme y me penetro pero rápidamente se bajaba y volvia a lamerme mi culito dilatado y ahora todo mojado en semen de perro. Asi que me fui para el sillón y en posición de misionero le agarre las patas de adelante para que pudiera penetrar profundo y cuando por fin logro meterla bien fue lo mas maravilloso que sentí, cada ves mas fuerte en cada embestida, repetidos ...
    ... movimientos pélvicos hacían que se pusiera mas gruesa y el lubricante caliente hacia que cada penetración se sintiera muy placentera. Era la primera vez que tenia sexo anal y oral y fue CON UN PERRO…pero la verdad a mi me parecía como si lo hubiese hecho de toda la vida, me sentía cómodo, y sentía que podía complacer y hacer muy feliz a Oso y a otros perros. Repetimos una vez mas la acción después de que se bajara y me chupara con su lengua muy húmeda por todas mis nalgas y culito. Pero veía que no se abotonaba mucho y además de que no me penetraba con todo el pene y dejaba el nudo afuera. Me confié y pensé que era que no podía meterla y no le tome nota al asunto. Lo coloque encima del sillón he igual que la primera vez me senté a cabalgar en el pepino mientras trataba de hacerle de nuevo sexo oral pero como que no se ponía bien duro, si le gustaba mucho pero como que estaba raro, como insatisfecho por no poder llegar hasta el final y liberar la presa de semen de perro calentito en las primeras embestidas, asi que me lubrique de nuevo y me puse de rodillas junto al sillón me incline y apoyé el resto del cuerpo y mi cabeza en el mismo y dándome nalgadas le insinué que me montara. Me dio unos cuantos lenguazos en el orto y se subió, y como con un calculo perfecto me clavo su pene y comenzó a embestir pero esta ves mas fuerte que en la posición del misionero asi que tuve que agarrarle una de sus patas traseras con mi brazo para que no parara de penetrar como lo hacía de bien, después de ...