Escapada en la montaña (Parte III)
Fecha: 03/10/2022,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: MifiLozano, Fuente: CuentoRelatos
Se dispusieron a dar una vuelta por el bosque. La mañana era preciosa, el sol se colaba entre los claros de los árboles, la temperatura cálida y perfecta, se oían pájaros, el movimiento de las ramas, el sonido de un río no muy lejos, era el lugar perfecto para desconectar del mundo.
Siguieron un sendero que se adentraba en el bosque, lo recorrieron durante un rato charlando de cosas banales y haciendo bromas. Junto al sendero encontraron un cúmulo de grandes piedras que daba a un precipicio.
-Ayúdame a subir ahí, quiero disfrutar de las vistas. –dijo Sarah.
Matt la agarró por los muslos y la impulsó hacia arriba. Quizás la agarró más de lo que debiera, pero Matt no podía dejar pasar cada oportunidad de disfrutar de una de las partes del cuerpo que más le gustaba de Sarah, ella era consciente de ello y por eso sonrió mientras subía, Matt siempre la hacía sentir muy atractiva y eso le encantaba.
-Guau… es precioso… -se tomó su tiempo para contemplar todo el valle.- bueno… ahora viene lo difícil. ¿Cómo bajo de aquí? –dijo Sarah entre risas.
-Lánzate y yo te sujeto en el aire como una bailarina. –contestó Matt levantando los brazos.
-Jaja. –volvió a reír Sarah.– ni yo soy una bailarina ni tu puedes sujetarme…
Se fue deslizando lentamente por las rocas hasta estar lo más cerca posible del suelo y desde ahí saltó para caer justo delante de Matt, que la abrazó para sujetarla y permanecieron así unos segundos, se miraron a los ojos, y Sarah le robó un beso antes ...
... de zafarse entre risas.
Siguieron el camino hasta que los llevó a un río.
-¿Qué hacemos, lo cruzamos o nos damos la vuelta? –cuestionó Sarah
-¿Y si seguimos la senda del río? A ver donde nos lleva. –contestó Matt.
Prosiguieron río abajo caminando por la orilla del río disfrutando del sonido relajante que este producía hasta que llegaron a una pequeña cascada que rompía en un pequeño lago de agua cristalina.
-Ha sido buena idea seguir el río. –dijo Sarah.
-Apetece un baño, ¿a que sí? –dijo Matt quitándose la camiseta y el pantalón y tirándose al agua. Se acercó a la orilla después de nadar un poco para convencer a Sarah de que se bañase. Al salir del lago, el agua había hecho que sus boxers se apretaran, marcándolo todo.
-¿por qué no te bañas cariño? Está perfecta.
-Ahí voy. –contestó Sarah sin quitarle ojo a esos boxers.
Se quitó la camiseta y los shorts que llevaba dejando al descubierto un conjunto de encaje negro que dejó a Matt con la boca abierta una vez más.
-¿No tienes ropa interior que no me ponga a 100 verdad? –dijo Matt y los dos soltaron una carcajada.
Nadaron, bucearon, jugaron y se besaron durante un rato en aquel lago hasta que decidieron salir y tumbarse en una gran roca que había junto al lago, suerte que habían traído en la mochila una manta de cuadros típica de picnic que encontraron en la cabaña y que pusieron sobre la roca antes de tumbarse.
Estuvieron un largo rato mirando las nubes, divagando sobre futuros posibles o ...