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Intercambio en Medellín
Fecha: 12/11/2022, Categorías: Intercambios Autor: Webmonster6910, Fuente: CuentoRelatos
Sucedió en Medellín. Nos hospedamos en un hotel de una calle numerada como 70. Habíamos escuchado que en Colombia eran frecuentes los bares y discotecas con ambiente swinger. No era el intercambio lo que nos interesaba sino que por lo que investigamos, era posible tener sexo ahí mismo en las instalaciones aún sin hacer intercambio. Decidimos ir. Al llegar no había manera de distinguir el lugar excepto por el número claramente referido afuera del local. No digo que fuera fácil distinguir pero estar entre un supermercado y una escuela de idiomas no lo hacía tampoco tan difícil. Al entrar nos preguntaron por supuesto si era la primera vez. Una vez que contestamos nos dieron algunas explicaciones, cobraron y nos entregaron una llave con número de locker un par de sandalias de baño a cada uno, de nuestras respectivas tallas. - En el locker están sus toallas señores y a la derecha los vestidores. Ana me miró y yo entendí la duda así que pregunté. La respuesta fue típica de la amabilidad colombiana: - Yo le recomendaría a los señores retirarse todas sus prendas y solo cubrirse con la toalla. Ustedes pueden desplazarse por todo el complejo desde los sillones a los cuartos privados, regaderas, sauna etc. Si es la primera vez tal vez les resulte fuera de plan hacer algún intercambio aunque la señora es particularmente atractiva y eso seguramente va a facilitar que se acerquen interesados. Además algunas parejas pueden ser muy convincentes cuando son experimentados. No ...
... puedo negar que tuve un connato de erección cuando hizo aquella referencia a Ana que por cierto apenas llevaba una playera y un short de mezclilla. Nos metimos al mismo vestidor. Siendo bastante estrechos fue divertido porque al tiempo de despojarnos de la ropa había contacto físico casi constante. Ana no jadeaba pero conociéndola como la conozco pude notar que estaba empezando a excitarse. Ya desnudos nos besamos un poco ahí mientras yo amasaba a su trasero. - ¿Ya pensaste si vamos a intercambiar o hacer alguna otra cosa por el estilo? - me preguntó. La respuesta ella la sabía pero no sé si lo repetimos en voz alta por asegurarnos, por diversión o por empezar a excitarnos: - Si te gusta alguien, hombre o mujer y quieres llegar a algo yo te acompaño pero ya sabes que yo sólo cojo contigo amor. - Yo sé y me gusta que lo digas pero tú no me pones límites y yo no quiero ponértelos a ti. Guardamos las cosas en nuestros lockers y entramos al salón. Ordenamos un par de bebidas pero les dijimos que esperarán a vernos instalados. Queríamos recorrer el lugar. Había un salón bastante grande en planta baja con pista de baile y el tubo que no podía faltar. Una pequeña alberca. Un pequeño aparador dentro del cual había 3 regaderas separadas del salón por un cristal. Un pequeño cuarto con una cama cubierta de vinil. Sanitarios y a un lado un sauna que se adivinaba grande aunque la verdad, por el vapor era difícil apreciar el tamaño pero tenía las gradas habituales en 3 ...