1. Visita al Paraíso


    Fecha: 09/12/2022, Categorías: Hetero Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    Aquella era un noche muy especial. Mi amiga Zara iba a casarse, y todas estábamos exultantes. Habíamos ido a los mejores bares de la ciudad. Bebimos, reímos... En definitiva, lo pasamos muy bien todas juntas. A las 5 las chicas decidieron que sus pies no iban a aguantar más aquellos tacones y decidieron irse a casa a dormir; sólo nos quedamos Zara y yo, su más fiel escudera.
    
    -Jobar, Bea... Qué rácanas son. No nos aguantan nada.
    
    -Ya te lo dije antes de salir - Dije, sonriendo.
    
    -Me han defraudado un poco.
    
    -Anda, no seas aguafiestas, que aún no acabó la noche.
    
    Pasamos por la calle Olivar, y a mi amiga se le ocurrió algo.
    
    -¿Por qué no entramos aquí?
    
    -¿Estás loca? Vas a casarte, y, precisamente, quieres entrar ahí.
    
    -Por favor... Sólo un ratito...
    
    Definitivamente había perdido la cabeza. El local "Nube", era famoso por las fiesta que allí se montaban. Fiesta Swingers para ser más exactas.
    
    -Está bien... Sólo un ratito. - La advertí.
    
    Al entrar el ambiente cargado y con olor a sexo, por poco me hace vomitar. Pero no quería estropear la fiesta a mi amiga.
    
    -Voy a pedir un par de copas - Dijo - Tú espérame aquí sentada.
    
    La voz pastosa de Zara, hacía indicar la cantidad de alcohol ingerido aquella noche. Un par de minutos más tarde, regresó con dos copas.
    
    -Nos ha invitado el camarero. Está buenísimo.
    
    -Eres de lo que no hay.
    
    -Pfff... Agua-fiestas.
    
    -Pero mírate, si estás que te caes.
    
    -Lo que deberías hacer, es mirar enfrente ...
    ... tuyo.
    
    Así lo hice, y dos chicos, guapísimos, no nos quitaban ojo.
    
    -Están buenos, ¿eh?
    
    -Zara, Zara... Que te veo venir.
    
    -Son monos, Bea. No digas que no.
    
    Lo eran. Estaban como un par de trenes. Y seguían mirando, sin cortarse.
    
    -Tú disimula.
    
    Nos pusimos a hablar, desinteresadamente. Pero, por el rabillo del ojo, vi como uno de ellos se acercaba.
    
    -Hola, chicas. ¿Qué tal va la noche?
    
    -¡Hola! ¿Qué tal guapo? Yo soy Zara, y ella es mi amiga, Bea.
    
    Estaba desatada. Y cuándo se pone así no hay quien la pare.
    
    -Encantado. ¿Queréis venir a nuestro reservado?
    
    -No - Dije.
    
    -Pues, yo sí.
    
    -Pero, Zara...
    
    Y allí me dejó, más sola que la una. Ella sabrá lo que hace... Aunque claro, al final, quien la tiene que aguantar, soy yo.
    
    -Parece que tu amiga te ha dejado sola.
    
    -Bueno... Eso parece. ¿Y tú eres...?
    
    -Joan, el amigo de Luis... Ese que se acaba de ir con tu amiga.
    
    -Ya... ¿Querías algo?
    
    -Me preguntaba... Si te apetecería venir a mi reservado...
    
    -No, gracias.
    
    Joan se echó a reír, y dijo, con una sonrisa pícara.
    
    -¿No irás a dejar a tu amiga sola?
    
    Esa frase hizo click en mi cerebro. Estaría feo, dejarla sola el día de su despedida. Así que, acepté a regañadientes.
    
    -No me has dicho tu nombre... - Dijo mientras nos encaminábamos hacia allí.
    
    -Beatriz.
    
    -Encantado, Beatriz - Dijo parándose en una puerta - Pasa, por favor.
    
    Cuándo entré al reservado, casi me caigo de culo. Zara, estaba de rodillas, con las tetas al aire, lamiendo la ...
«123»