1. Cogiéndomela en la calle


    Fecha: 26/12/2022, Categorías: Transexuales Autor: subtitulados, Fuente: CuentoRelatos

    Estaba llevando lo del ser el macho de Zulema a niveles que nunca imaginé. Ya casi no tenía sexo con Lety y solo me apuraba para cogerme a mi chica transexual.
    
    La locura me había invadido tanto que una ocasión, ella me dijo que no estaría en casa, que estaría esperando a un cliente y estaría en donde a veces se para para su trabajo.
    
    Como ya les he contado en otros relatos, Zulema es una rica transexual de quien ahora soy su macho, me la presento mi amiga transexual Susana y ahora no podía dejar de cogérmela.
    
    Salí en mi carro desesperado por buscar a mi perra, miraba atento cada calle y lugar donde ella me comentaba que andaba en las noches, parecía un degenerado y obsesivo buscando a mi presa, finalmente cerca de la calle que te saca a una estación del metro de la línea 2, ¡la encontré!
    
    Z: ¿Qué haces aquí?
    
    L: ¡Te ando buscando!
    
    Z: ¡Pero te dije que hoy vería a alguien!
    
    L: Jajá, ¡lo siento quería verte!
    
    Zulema, molesta, me tomo dela mano y me llevo a un callejón que estaba a lado y comenzó a reclamarme!
    
    Z: Que te pasa Luis, tengo mis asuntos, ¡no puedes aparecerte cuando quieras!!
    
    L: ¡Que, ahora me niegas, que el que veras te coge mejor!
    
    Z: No seas idiota, es un cliente, ¡el me paga!
    
    Esas palabras me molestaron así que comenzamos a discutir más fuerte, en eso, ella me empujo para regresar a la calle, ¡pero yo la tome del brazo y le impedía irse!
    
    Z: ¡Luis ya basta!!!
    
    ¡Yo estaba molesto y comencé a apretarla de los brazos y no al ...
    ... dejaba irse, Zulema no gritaba fuerte, aunque si levantaba la voz, de pronto se libró de mi mano y me dio una cachetada!
    
    Yo todo molesto por la situación, la observe, ella estaba nerviosa, me miraba como con miedo, la tome del brazo y la empuje a la barda fina del callejón, ahí la empuje y el di un jalón de cabello, ella gemía, ¡pero eso me comenzó a excitar!
    
    L: En tu vida te atrevas a tocarme, ¡puta!!
    
    Z: ¡Déjame, estás loco!!
    
    L: ¡Ahora veras, me la pagaras!
    
    Z: ¿Qué haces? ¡¿Qué haces?!
    
    Le subí su mini vestido, ¡le hice a un lado su tanga y de golpe empecé a meterle la verga!!
    
    Ella gritaba y adolorida se movía para repelerme, pero yo enfurecido y caliente, ¡la sometí con mi brazo y empecé a hacerme paso por de su apretado culo!
    
    Z: ¡Ah, basta, agh!!
    
    L: ¡Cállate, uhm!!
    
    Z: ¡Me lastimas, basta!
    
    L: Toma, ¡esto es por puta!!!
    
    Comencé a moverme fuerte, con un brazo la sometía empujándola en la barda y con el otro le apretaba sus ricas tetas, ella sacaba lágrimas de dolor y miedo, ¡pero yo no me detenía y más duro el daba a la puta!
    
    Se escuchaban murmullos, se oían algunas sirenas ella me rogaba me detuviera, pero yo estaba ardiendo y no me detuve, contrario a eso, ¡le mordía el cuello y más rápido se la dejaba ir!
    
    Z: ¡Ah, por favor, me duele!!
    
    L: ¡Te gusta! ¡No lo niegues!!
    
    Z: ¡Ya!! Luis!
    
    L: ¡Uhm, segura, segura la saco?!
    
    Yo sabía que ella era adicta a mi verga y lo sentí al tocar su diminuto pene el cual mostraba los signos de la ...
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