Enseñándole algebra a la bonita.
Fecha: 26/01/2023,
Categorías:
Jóvenes
Autor: youngwulf, Fuente: RelatosEróticos
Un día mi vecina paso a nuestra casa, platico con mi madre y saco el tema de su hija y sus malas notas en algebra, mi mama le comento que yo era muy bueno en eso y casi a fuerzas a petición de mi madre tuve que ir a ayudarle a estudiar.
Esta chica ya la había visto pues era mi vecina como a tres casas de distancia, era muy joven, delgada, un cuerpo entallado, tetitas respingadas y culo paradito, muy linda figura, pero cuando la miraba no me llamaba la atención pues era joven, una adolecente completamente, siempre salía muy discreta y arreglada, con su cabello negro lacio y su carita linda de tés clara.
Llego el día un miércoles que me presente en su casa, toque la puerta me recibió su madre, me pidió que pasara a la sala y tomara asiento, me ofreció algo de tomar, yo enfadado algo molesto pues ese tiempo hubiera preferido dedicarlo a jugar videojuegos u otra cosa.
Su madre le grito por su nombre, --vane baja!
Cuando justo delante mío bajando las escaleras comenze a ver unas lindas piernas delgadas bien formaditas, completamente descalza, poco a poco fui descubriendo a vane mi vecinita, esos pies delicados tocando con la punta de sus dedos y luego el talón cada escalón, sus pantorrillas sin bellitos, traía un vestido hasta las rodillas
primaveral de tirantes, cuando se paró frente a mí y nos presentaron, me puse en pie y estire mi mano, vi su carita tan más bella y toque su mano suave, su mano no hacia fuerza al saludar, se quedaba flojita.
Ese día empezamos ...
... con la clase, le puse unos ejercicios algebraicos para ver su nivel y en que fallaba. Mientras los contestaba, yo sentado a su lado no podía dejar de mirarla, le veía sus hombros, sus piernas cerradas sentada con delicadeza como una señorita, sus manitas suaves, hasta las palmas la tenía rosaditas.
Vane se desesperaba al no saber qué hacer en algunos problemas, yo ya deseándola aprovechaba para tocar sus manos y ayudarla a despejar correctamente.
Me acerque más a ella, podía oler su cabello y su ropa limpia, ella se incomodó un poco y acomodo su cabello poniéndolo detrás de su oreja, cuando hizo eso, pude sentir su aroma, algo indescriptible, era un olor a adolecente, me puso muy cachondo sentir su calor tan cerca.
Su mama, grito desde la cocina que tenía que ir a la tienda, tomo sus llaves su bolso y salió apresurada.
Ese era mi momento, así que aprovechándome de esa personalidad obediente de la niña, acomodándome haciendo que miraba lo que hacía pase mi brazo alrededor de ella, pose mi mano sobre su hombro mientras le explicaba por qué se había equivocado, Vane se quiso quitar pero no la deje, con mi brazo la detuve y la puse en su lugar, la nena sintió que yo mandaba en ese momento, y haciéndome pendejo explicando fui bajando mi brazo desde su hombro, por su brazo, hasta llegar a su cintura, yo habría mi palma completa acariciándole el costado de su pierna y su nalga, estaba sentada así que solo hasta donde me permitiera la posición, ella ya ni me pelaba, tenía ...