En el patio de los vecinos
Fecha: 17/02/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: DeseoProhibido, Fuente: CuentoRelatos
... tanga.
-claro, pero eso solo tapa el frente dudaría más del panty, que tiene más que cubrir -al tiempo agarraba el panty y se lo mostraba, me acerqué a ella y ya perdido en el deseo le toqué el culo y le pregunté:- ¿qué usas ahorita?
-Unos iguales -respondió un poco nerviosa, pero sin quitarme la vista.
-Esas deben oler mejor -le dije mientras me lleva a la nariz las que tenía en la mano y con la otra cambiaba de su culo a su vagina para seguir sobando por encima del pantalón, que ya se sentía caliente, fue donde me di cuenta que no había marcha atrás.
La empecé a besar, tiré el panty y la empujé contra la pared, mientras nos besábamos seguía tocándola y ella me empezó a desabrochar el pantalón, entendí que teníamos poco tiempo, así que hice lo propio a una mano, y cuando lo desabroché su pantalón metí mis manos debajo de sus pantys y ya estaba muy mojada, identifiqué su clítoris y al meter mi dedo fácilmente encontré su punto g, lo estimulé y sus rodillas flaquearon, saqué mi mano y la llevé a mi boca para chupar sus fluidos, y le dije: “con más tiempo te comeré tu panochita rica” olía riquísimo a sexo.
Le bajé el pantalón a las rodillas y la volteé contra la pared, le masajeé el culo carnoso y suave que tiene, levanté su blusa, desabroché en un movimiento su sostén y dejé sus ...
... tetas al aire, después la empiné, se inclinó con una facilidad dejándome su cola al aire como si estuviera acostada, ahí aproveché y le metí la verga de un golpe, me sentía en la gloria. Empecé a bombearla y el sonido era riquísimo su panocha empapada apretaba delicioso, el golpeteo se sentía tan bien sobre ese culo suavecito, no decíamos nada solo gemidos leves, le sobaba las tetas desde atrás y sentía sus pezones duros, le colgaban tan rico, le metí los dedos a la boca y después con esa saliva se los metí en el culo para estimularla.
-quiero probar tus labios mientras te cojo –le dije.
La recosté en el suelo y retiré el pantalón, se la volví a clavar toda y le mamé las tetas, después me abrazó con sus muslos en la espalda, me jaló hacia ella, nos empezamos a besar y aumentamos el ritmo, sabíamos que nos vendríamos y en ese momento no importó, cuando me apretó con los muslos y sus brazos en la espalda nos venimos juntos en un gemido ahogado. Solté todo.
Pasaron 30 segundos y volvimos en nosotros, dije:
-me voy -nos empezamos a vestir y le di su panty limpia- ponte esta.
-¿por qué? –me preguntó.
-porque me llevaré la otra de regalo.
Sin más salí caminando por la puerta de enfrente, despidiéndome de Gustavo, dándole gracias por lo que haría por mí y a Vanessa por su ayuda.