Mi compañera fotógrafa (Parte 1): Descubrimiento
Fecha: 01/03/2023,
Categorías:
Infidelidad
Autor: PlumaDeVidas, Fuente: CuentoRelatos
Era mi primer año de facultad y viviría lo impensado gracias a mi compañera Maia, explotarían deseos que nunca creí tener y cosas que nunca habría pensado hacer, algo en mi iba a cambiar y yo estaba dispuesto a explotarlo.
Vamos al inicio, yo, Marcos, 18 años, de contextura atlética y de altura normal, con mi novia de secundaria, con quien llevaba un gran noviazgo, inocentes y recién iniciados ambos en el sexo, ella tímida aún y yo muy enamorado. Ambos con poca experiencia.
El fin de la secundaria marcó nuestra separación diaria, empezando distintas carreras en distintos lugares ambos.
Cada vez nos veíamos menos y yo al entrar a la facultad afronté un cambio inmenso, mujeres de todas las edades, de todo tipo, con quienes podía tener conversaciones mucho más interesantes que con mi novia y amistades anteriores, gente que podía hablar de sexualidad tan abiertamente como nunca había visto, gente con relaciones abiertas, bisexuales, etc. Mis hormonas estaban a full y exploraba una libido que no creí tener hasta entonces.
Y ahí apareció ella, Maia, quien siempre se llevaba todas mis miradas en las clases, ella de 23 años, pelo corto oscuro, bajita y flaca, bien blanca, pálida, que denotaba más al usar casi siempre ropa negra, su cuerpito desproporcionado a las hermosas tetas que gustaba de lucir en atrevidos escotes o remeritas sin corpiño, remeras de red que denotaba el contorno de sus pechos, unas piernas hermosas bien apretadas por medias altas y polleras a juego, ...
... además de su belleza me causaba un morbo enorme y que desconocía su choker pegado a su hermoso cuello. Esto despertaba un deseo particular que luego descubriría. Yo estaba a full, ella era la dueña de mis pajas, explotaba mi perversión.
Además de mi morbo siempre observaba como ella cargaba una cámara, tenía que entrarle por donde fuera (en todo sentido) y por ahí empecé. Lanzado de una como siempre y sin saber que buscaba la encaré al salir a los pasillos cuando la encontré sola, distraída con su celular, y me acerqué:
-Hola como andas? somos compañeros en (nombre de la materia)
-Si si, lo sé (sonriendo de forma desafiante que me desarmó completamente)
-Ah, em bueno, te iba a pedir apuntes y em… veo que tenés una cámara analógica (estaba tirando todos los argumentos a la cancha de una, su mirada me tiro todo abajo)
-Mira, eso querés? Pensé que mirándome tanto como me venís mirando me ibas a salir con otra cosa
-Como? Yo te venía a pedir lo de hoy nomas (tratando de articular palabras nerviosamente)
-Ai nene, de verdad? Bueno, parecías más interesante... está bien, ahí te paso los "apuntes".
Me pasó lo que estúpidamente fui a pedir y se fue, medio molesta y yo con mi autoestima por el piso. Pero… porque estaría molesta?
Esta duda me carcomió por semanas y yo culpándome por boludo de no prever que fuera una piba tan directa, ya no estaba encarando pibitas de mi edad que esbozarían una risa nerviosa o timidez al verme prestando atención a ellas, a ese ...