Profesora haciendo historia (3)
Fecha: 11/03/2023,
Categorías:
Transexuales
Autor: Victoria Bou, Fuente: CuentoRelatos
Mi relación con Bernardo era puramente sexual, creo que nos teníamos el afecto necesario para disfrutar juntos pero nada más. Y yo nunca dejé de pensar que había algo de mercenario de notas en él, pero muy poco y sin egoísmos.
Un día me contó que algunos compañeros de la clase, lo que según él me deseaban tanto, estaban preocupados por las notas y dependían de aprobar el próximo examen. Me pidió que los ayudara, si podía darles unas clases particulares. La buena voluntad de profesora se mezcló en mi espalda con la tentación que esos muchachos representaban. Le dije que lo pensaría, por ser prudente. Pero él insistió todos los días con el tema hasta que venció mi resistencia y mi sensatez y terminé aceptando. Acordé con los compañeros de Bernardo que pasasen por mi casa el sábado próximo por la tarde. Me arrepentí enseguida pensando lo que Bernardo les habría contado de lo que hacíamos allí, pero era tarde.
Puntualmente llegaron los tres. Carlos, alto y rubio, Víctor, pelirrojo y simpático, y Guillermo, el más serio del grupo, todos mayores de edad. Todos bien formados como jugadores de rugby, y tan arreglados como si fueran a tomar la comunión. Al verlos pensé; qué cara de niños felices entrando a una juguetería.
La tarde transcurrió en orden, nos dedicamos al estudio con seriedad. Hubo por supuesto alguna broma inocente y muchas miradas hacia el escote de mi blusa abotonada por delante. Me levante a alcanzarles un refresco y al inclinarme para servir mis tetas ...
... quedaron tan expuestas como fijas sus miradas en ellas. Así de fijas, pero en mi culo apretado en una falda abotonada, también estuvieron cuando retiré los vasos y marché a la cocina. Los tres se aparecieron allí para ayudarme a lavar y ordenar, y sentí algunos roces sobre mu cuerpo que no parecían ser accidentales.
Al regresar al living les propuse dejar la clase de apoyo. Me pidieron que charlásemos un rato y si podían servirse algo del bar. Les dije que sí, sin pensarlo mucho. Conversamos e varias cosas, el colegio primero obvio, pero todo derivó en sus relaciones con las chicas. No se encontraban conformes con ellas y lo complicadas que eran. Pensé que eran jóvenes para decirles que por el resto de sus días iba ser así.
De pronto Guillermo, recorriendo la biblioteca me dice:
-Profe tiene le jugo de Twister!
-Si- contesté- es casi una reliquia, no pensé que lo conocieras.
-Nunca lo jugué, pero me han contado que es divertido.
- Sí, depende de con quien se juegue.
-Que quiere decir con eso?
-Bueno que hay que conocerse un poco para retorcerse y rozarse con las posiciones del juego.
-Podemos jugarlo?- dijo Víctor- Nosotros ya nos conocemos
-Es una tontera- les dije- además hay que descalzarse para jugar sobre el tablero.
-Dele profe, juguemos un rato- terció Carlos
No se cómo me dejé convencer, pero al rato estábamos contorsionándonos en el tablero. Debo admitir que estaba divertido pese a que el juego nos había acalorado y mi escote brillaba ...