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La letrada
Fecha: 22/04/2023, Categorías: Hetero Autor: Hansberville, Fuente: CuentoRelatos
... de excitación sin igual pedía algo que no deseaba. Le excitaba que aquel animal culpable de apalizar a un adolescente le pagase su indulto con aquella sesión de salvaje sexo anal. A Marta le gustaba oírse suplicar clemencia mientras Pedja la ignoraba y la sodomizaba sin respiro. Dos horas después de aquella experiencia sexual extrema, la abogada comenzó a vestirse y recomponerse para irse. Lo hacía ante la cama donde la observaba el delincuente. Poco a poco fue colocándose su conjunto de ropa interior negra. Sujetador, tanga y medias de encaje. Se embutió en su falda de tubo con elegancia antes de abotonarse lentamente la camisa de seda blanca. Mientras hacía todo eso admiraba el maravilloso cuerpo de su defendido. El típico espécimen de veinticinco años, “petado” de gimnasio con la mayoría de sus escasas neuronas atrofiadas por esteroides, anabolizantes y un sin fin de sustancias dopantes y psicotrópicas. El numerito de la vestimenta había llevado a Pedja a sufrir una erección y Marta no dudó en aplacarlo proporcionándole una magnífica mamada antes de salir definitivamente de aquel agujero maloliente donde le había dado por culo. Mientras bajaba deprisa por aquella escalera se repetía para sus adentros que aquello había sido una auténtica locura. A pesar de que su coche lo encontró rodeado de críos, muchos de ellos futuros raterillos, comprobó que estaba intacto. Sin prestar atención a algún piropo soez subió al coche y en una rápida maniobra hizo chirriar las ...
... ruedas para salir pitando de aquel barrio de mala muerte. Después de una hora de atasco, por fin, logró entrar en el aparcamiento subterráneo del edificio donde vivía. Un luminoso apartamento en una séptima planta en pleno centro de Madrid. Al abrir la puerta la embargó el dulce aroma de su hogar y sin perder tiempo se metió en el baño. Necesitaba una ducha urgentemente. Al sentarse en el váter pudo comprobar los efectos secundarios de su disfrute: -¡JODER! El cabrón me ha dado bien fuerte. Y menos mal que no la tenía muy grande. Al limpiarse, unos pequeños restos de sangre certificaron el estropicio. Se terminó de desnudar ante el espejo y comprobó como en su pecho derecho, muy cerca de su areola, estaban las marcas de los dientes del yugoslavo. Se recordó cabalgándole mientras recorría cada uno de los abdominales y como en el momento del clímax él se incorporó para morderle las tetas mientras ella llegaba al orgasmo. Sin más, se metió en la ducha. Abrió el agua caliente y dejó que el líquido recorriera su cuerpo llevándose cualquier resto de Pedja. A la mañana siguiente, en su despacho del bufete de su padre, la letrada recibía a un cliente económicamente solvente aunque con fama de problemático y mal pagador. Hasta ese momento, los asuntos de Jhony, los había llevado don Gregorio, el experto socio de su padre pero decidieron que sería un buen comienzo para la nueva letrada del despacho. Marta era una buena abogada. Conocedora de todos los resquicios legales y ...