1. Mi sobrino sabe cuidarme


    Fecha: 17/08/2023, Categorías: Sexo en Grupo Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... desesperación.
    
    P –Ya cójanme.
    
    Alfonso se acostó por orden de Juan Carlos, a mí me ordenó que agarrara la verga de su amigo y me la metiera en la concha, una vez que lo hicimos, le dijo a Alfonso que me abrazara pero que permitiera que mi cabeza se ladeara para poder mamar la verga de Gabriel. Hicimos la prueba cuando Gabriel se acostó en la cama, dejando su verga cerca de mi boca, comencé a chupársela. Juan Carlos me escupió en el ano, después lo hizo en sus dedos, de forma no muy delicada me metió el primer dedo, cuando estuvo bien adentro, me metió un segundo dedo, cuando este terminó de entrar me los sacó rápido para inmediatamente meterme tres dedos, yo di un pequeño grito, él comenzó a moverlos buscando que mi agujero trasero estuviera bien abierto, cuando pensó que ya sería más fácil meter su verga, la acercó a mi ano, la metió con un poco de trabajo.
    
    P –Así mi macho, lléname de rica carne.
    
    Cuando la tuvo toda adentro de mí, pidió que no nos moviéramos, yo lo agradecí pues al permitir que me acostumbré a la verga que tenía metida en el ano, me iba a dar un enorme placer, paso como un minuto cuando yo empecé a moverme lentamente. Gabriel empezó a cogerme la boca muy rápido.
    
    J –Espera Gabriel, deja que sea mi tía quien marque el ritmo en que la cogeremos.
    
    Gabriel dejó de moverse y yo con ella en mi boca, la acaricié con mi lengua, su sabor no era muy rico, pero bueno era la verga era lo que yo necesitaba. Juan Carlos y Alfonso se movían lentamente al ...
    ... igual que yo, Gabriel ya no se movía solo daba pequeños gemidos por las suaves caricias que le hacía a su verga con mi lengua, así estuvimos algunos minutos. Yo necesitaba más placer así que aceleré mi ritmo, mi cadera se movía cada vez más, mi boca ya exprimía el pito de Gabriel.
    
    Los tres machos que tenía dentro de mí, ya estaban gritando, yo quería gritar pero la verga que tenía en la boca me lo impedía. Comencé a chuparla más rápido, sabía que con eso lo haría acabar y podría gritar lo que quisiera.
    
    G –Sí que rico la mamas, sííííííííí.
    
    Su leche joven lleno mi boca, su sabor no era algo delicioso, pero no estaba mal, me tragué la leche y empecé a gritar.
    
    P –Así mis machos, cójanse a su puta.
    
    Ellos entraban y salían, sus gemidos eran fuertes, respiraban sobre mi cuerpo, el cual empezaba a tensarse pues me estaba llegando un rico orgasmo.
    
    P –Que rico me cogen, me estoy viniendo.
    
    Mis jugos empaparon el pito de Alfonso, Juan Carlos me besaba la espalda, eso me prendió más. Mi sobrino sabía cómo hacerme sentir placer, sabía satisfacerme.
    
    A –Antes de venirme quiero darte por el culo Pamela, vamos a cambiar Juan Carlos.
    
    Juan Carlos me la sacó, yo me paré para sacarme la de Alfonso, le sonreí.
    
    P –Así que quieres mi culo.
    
    J –Para que lo disfrutes al máximo Alfonso, cógetela tú hasta que te vengas en ese rico ano.
    
    Juan Carlos me hizo ponerme en cuatro, yo saqué lo más que pude el culo, aunque con lo grande que lo tengo no era necesario, pero me gusta ...