Lo descubrí fingiendo dormir
Fecha: 03/09/2023,
Categorías:
Sexo con Maduras
Autor: milkShooter, Fuente: CuentoRelatos
... mano con cada jalada que le daba, como plastilina, como una masa iba creciendo y creciendo y yo caliente sentía que me desmayaba solo de verle esa verga enorme, no lo creía!
Nuestra respiración se cortaba y no nos salían palabras, yo tomé la regla de la mesa, me temblaba la mano, y le medí ese mástil erecto, 26c m qué diablos era eso, un animal, mi mano se veía diminuta. Caí de rodillas y solté la regla, con mis dos manos empecé a jalar esa vergota y mi boca comenzó a comerle esa cabeza riquísima, mi lengua lo rodeaba de un lado a otro, se metía en su glande, lo rodeaba, él gemía, repetía “tía, tía” y yo seguía jalando ese mástil con ambas manos, no podía creer que fuera real, me entregué a chuparla, a comerla, le pasaba la lengua desde sus huevos hasta su cabezota, le daba mordiscos y él gruñía y yo lo miraba fijamente a los ojos y él extasiado.
Se la apretaba fuerte con ambas manos como si se me fuera a ir, hubo un momento en que lo tomé con una mano y me empecé a pegar en la cara con su pedazo de polla, sentía su peso en cada golpe, en mis mejillas, en mi frente en mi boca, en especial en la boca, no sé porque me producía tanto placer pegarme en la boca, quizá algún fetiche, mi nuevo fetiche y eso me provocó un profundo orgasmo que recorrió todo mi cuerpo.
Se me vencieron las piernas, se me fue la fuerza de los muslos y solo pude caer frente a él apenas sosteniéndome con las manos en el piso, sentía como se convulsionaba mi vagina dentro de mi, tan delicioso tan ...
... rico, duré así varios segundos, cerré los ojos porque se me fue la vista un momento, como cuando te mareas o te levantas rápido, debieron pasar varios segundos. Cuando me recuperé, lo vi a él sentado frente a mi en una silla y monstruo negro, durísimo, mojado, escurriendo de mi saliva y sus fluidos cayendo por su tronco y sus huevos.
-¿Esta bien tía? –agitado.
-Sí, si hijo -apenas pude responder.
Se puso de pie y me levantó de las manos, las puso sobre sus muslos para que me sostuviera, y metió su pollón lo más que pudo, yo no reaccionaba, solo sentía su cabeza intentando entrar en mi garganta con arremetidas, era una muñeca, no tenía fuerzas, solo sentía mi boca bien abierta y esa verga venosa follándome la boca, me sostenía del cabello fuerte y sus caderas empujaban, lo único que recuerdo es que mis manos apretaban sus muslos y después sus nalgas mientras se movían de atrás hacia delante cogiendo por la boca y yo daba arcadas y me dejaba respirar unos segundos y después seguía.
En veces me pegaba fuerte con su verga en mi cara, en mi boca y regresaba a follarme la boca y mientras su tranca empezó a palpitar supe que venía mi leche y empecé con otro orgasmo.
Quizá era sentirme rendida, de rodillas, sujeta del cabello, mis manos aferradas a sus nalgas, y ese tremendo miembro que me impedía gemir o gritar que tuve ese orgasmo, más lento pero intenso mientras sentía los lechazos en mi boca, intente tragar pero al tercero ya no pude y tuve arcadas, su carne salió ...