1. Nohemí, el fin de una era (?)


    Fecha: 13/09/2023, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Bolt2112, Fuente: CuentoRelatos

    La relación con Nohemí parecía que iba creciendo, nos disfrutábamos mucho, sabíamos manejar las situaciones que la rodeaban, dígase su “esposo” y su hermana, pero un día me comentó que estaba buscando su cambio a una oficina mucho más cerca de su casa, que aún no había comentado eso que la gente de su área, pero lo comentaba conmigo primero, a lo que no me opuse, al contrario tendríamos más tiempo de vernos los fines de semana, a lo cual lo comentó con su supervisor a lo cual se lo dio en cuestiones de días, llegando una de sus amigas en su lugar, pero esa es otra historia.
    
    Un sábado decidí no ir a mi oficina y llegar de sorpresa por Nohemí, y fue una grata sorpresa, se veía hermosa, nos besamos y decidió también pedir el día, justo a dos cuadras de esta oficina había un hotel, a lo cual nos seguimos, algo que no había pedido antes me pidió unas cervezas, a lo cual sorprendido, pero no espantado se las compré. Se había tomado tres como si fueran agua, algo que, si me sorprendió, al ver mi cara me dijo… yo si aguanto tomando… algo que era una gran mentira ya que a los pocos instantes ya se veía considerablemente mareada.
    
    Me bajé el pantalón y sacó mi verga de mi bóxer y la empezó a mamar, lo disfrutaba mucho, ver como recorría su lengua mi verga, como la metía y presionaba con sus mejillas, abrí su blusa, con ese bra negro hermoso resaltando el color de sus bellos senos rosados, me terminó de bajar el pantalón y sacarme los zapatos.
    
    Yo la levanté para hacer lo ...
    ... mismo y lamer su exquisito culo, estaba hincado y ella de pie al lado de la cama parada de puntas en sus pies y recargada en la cama con sus manos, sentía como le temblaban las piernas, besaba sus nalgas y me incorpore para meterle mi verga a lo cual se subió a la cama poniéndose en cuatro, y algo que nunca había hecho fue quitar mis manos de sus nalgas y ver como rebotaban en cada metida que le hacía, ver ese culo grande y firme solo para mí, en un punto las cervezas le iban a pasar la factura a Nohemí y me dijo… “quiero hacer pipí…”, a lo que respondí con un… “te acompaño…”. La tomé de la mano y sentándose para orinar, puse mi verga en su boca y me seguía mamando. Escuchaba como caía su orina en el agua a lo cual ya tenía el rostro rojo de pena, lo cual la tomé del cabello y la cogí por la boca.
    
    Se incorporó tambaleándose, la recargué en una pared, me hinque frente a ella y le subí una pierna y empecé a mamarle su conchita rosa con orina, a lo cual solo cerró los ojos y me presionó hacia ella, hasta sacarle hasta la última gota que emanaba de su conchita. Nos fuimos a la cama y empezó a mamar mi verga, sin ser pretencioso tal vez fueron 20 minutos de los cuales me dedicó con pasión, yo pasaba mis dedos por su conchita y su culo, se los metía, chupaba mis dedos para volvérselos a meter, ella no dejaba de mamarme.
    
    Después de todo ese tiempo, le dije que se montara sobre mi PERO quería metérselo otra vez por el culo, a lo cual accedió solo tomando mi verga y metiéndosela ...
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