1. La esposa fácil se confiesa


    Fecha: 24/10/2021, Categorías: Infidelidad Tus Relatos Autor: Giulia Prada, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    Hola mis amóres soy Giuliana y me complace ver que leen mis aventuras, de infidelidad, puede parecerles inverosímil que una mujer fiel y sin experiencia hiciera semejante féstival sexual, pues dejenme decirles que ni yo misma se como pude, porque si bien me revolque con Pablo durante tres años unas tres o cuatro veces por semana,era común que estuviera un lunes en el asiento trásero de algún carro rebotando sobre un pene, mientras el afortunado de turno se saboreaba mis pezones, un sabado por la noche en un callejon oscuro con los pantalones en los tobillos en cuatro patas, con 18 cm de carne hasta el fondo de mi ano dilatado y rojo, gozando hasta el delirio, por horas o simplemente acostada en una cama de motel siendo penetrada por uno y otro, borracha y jadeante, porque después  que descubres el placer de el gang bang O la doble penetracion te vuelves adicta. Imagina, el bobo de tu marido comiéndose una mugrosa descuidada(asi era literalmente) a la que muy pocos miran y tu tumbada en un lecho con ...
    ... cuatro tipos muy bien dotados peleándose por masajearte las entrañas con sus garrotes duros como piedra y dejarte devorar por ellos sintiéndote Catalina la grande. Ser ese plato exquisito para ellos y ellos tu buffet.para mi conocer y degustar tantos penes, fue algo que me hizo sentir viva, verles la cara de éxtasis acabando en mis orificios, para luego llegar a casa como una santa esposa. Eso no tuvo precio, cuando me tenía que ir de viaje siempre tenía una mini luna de miel salvaje con algún macho alfa que oliera mi celo, de hembra en calor. Rara vez los veia más de dos veces, me aburrian, podia pasar tres horas ensartada  deliciosamente por todos lados, y al acabar ya no  quería verlos mas. Mi placer era lo nuevo, lo extraño, gozaba mas cuando el tipo con el que bailé 5 minutos, me convidaba a fumar y a los segundos me tenía clavada contra la pared sin ningún pudor ni objeción, que viendo a algún conocido. Excepto a Pablo, el y su anaconda eran mi vicio, aun así nunca deje de tener sexo con muchos otros. 
«1»