-
La historia de mi vida
Fecha: 07/11/2021, Categorías: Confesiones Tus Relatos Autor: Julia, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
Soy adulto mayor, 61 años, casado, tres hijos, tres nietos. Desde los cinco años supe que yo era una mujercita, me ponía ropa de mamá. Un día ella me descubrió y con cariño me dijo que eso no lo debía de hacer porque era varón y estaba mal. Yo me avergonce y le dije que ya no lo haría pero en realidad ese día nació la nena que siempre he llevado dentro, lo seguí haciendo pero con más cautela. Así fueron pasando los años, me ponía ropa de mamá, de mis primas, me encantaba verlas maquillarse, eran muy bonitas y sexis y siempre fueron mis ideales a seguir. En los años 60 y 70 era un pecado que un niño actuará como niña, era señalado como puto, homosexual, mariquita, por lo que túve que reprimir mis sentimientos y actuar como "varón" cuando en realidad yo sentía ser una niña. No puedo decir que me gustaban todos los hombres, pero algunos eran lindos, fuertes, varoniles y si me llamaban la atención, sobre todo aquellos, que en ocasiones, por convivir con ellos en baños vestidores, les podía observar el pene, a mí me gustaban los penes grandes y gruesos creo porque el mío era muy pequeño, que más parecía vagina que pene. Las mujeres me llamaban la atención pero por como vestían, como se pintaban, como caminaban, como se sentaban, en fin como actuaban femenina mente como yo hubiera querido hacer. En una ocasión un amigo que me gustaba mucho y yo a él creo le llamaba mucho la atención por mis bonitas nalgas, estuvo a punto de cojerme en el baño del colegio, estábamos cada ...
... quien en su regadera y de pronto se acerco a mi por detras estando los dos desnudos y me empezó a besar el cuello y sentí su verga parada entre mis nalgas, me volteo y le agarre la verga y le di un beso en la boca, en ese momento escuchamos que venían otros compañeros y tuvimos que separarnos lamentablemente, estoy segura, digo segura porque en ese tiempo ya tenía un nombre "JULIA" que Luis, así se llamaba mi hombre, me hubiera hecho suya esa tarde y me habría hecho muy feliz y toda una mujer, nunca se volvió a presentar otra oportunidad. Para evitar los que dirán, a los 17 años empecé a cortejar a una muchachita la cual, al cabo de unos meses se hizo mi novia y con el pasar del tiempo mi esposa. Durante el noviazgo, tuvimos alguna intimidad, sin llegar al acto sexual aproveché para vestirla como yo quería, claro comprándole ropa que a mí me gustaba, como si fuera para mí. Le compraba pantaletas, medias, vestidos, zapatos, ella era muy pobre y todo me lo aceptaba inclusive dinero para ayudar a su familia pues yo tenía un buen trabajo y dinero no faltaba. Cómo dije, me case con ella y así mi hombría se salvó de las malas lenguas que ya empezaban a comentar que yo era puto, cuánta razón tenían. Una de las cosas que surgieron en mi mente fue, que como yo no podía cojer con hombres , fui deseando que fuera mi mujer quien lo hiciera. Tuvimos tres hijos, la verdad no estoy seguro de que son míos pero los quiero como tales. Después de tener el primero, tuve que ausentarme del ...