EL VETERANO DEL OMNIBUS II - Relatos Eróticos

EL VETERANO DEL OMNIBUS II

Al sentir cerrar la puerta de la casa del veterano del ómnibus tras de mí, camine lentamente hacia la parada del ómnibus, con una sensación extraña en mi cola, sentía ardor, como si aún tuviera algo metido en mi interior, me pase varias veces mi mano sobre mis nalgas, y sentía miedo de que se notara que me habían penetrado, espere el ómnibus mirando hacia la casa en la que había perdido mi virginidad, era una sensación de arrepentimiento, miedo, pero me había gustado.
Pasaron tres días, era sábado y aún estaba con conflictos en mi mente, después del mediodía, salí a andar en bicicleta, fui andando y cuando llegue a la plazoleta frente a la casa que perdí mi virginidad, estuve mucho rato observando desde la distancia, hasta que finalmente decidí ir hasta ella, golpie  y al abrirse la puerta, el veterano quedo sorprendido y rápidamente asomo y miro hacia todos lados si venia solo, yo en silencio solo lo miraba, el forzó una sonrisa y mi saludo preguntando si quería entrar, yo moví me cabeza afirmativamente, e ingrese con mi bici en su  casa, al cerrar la puerta se arrimó y tomándome de la cabeza me apretó contra su cuerpo y me dijo, hola como estas, bien le dije, me alegro y que andas asiendo por acá, solo vine a visitarlo, sonriendo me señalo una pared y me dijo que dejara la bici allí y me ponga cómodo.
No sentamos en el living y quedamos mirándonos en silencio, hasta que rompió el silencio preguntándome si me había gustado lo del otro día, le dije que en parte sí, me ...

... dolió y me molesto un par de días, pero que, si me había gustado, pero me quede con ganas de meter mi verga, el sonrió y me dijo, sos de los míos, te gusta dar y recibir, yo solo moví la cabeza afirmativamente.
Se levantó, me agarro de la mano y me llevo a su dormitorio, nos desvestimos quedando totalmente desnudos, nos acostamos en la cama y nos abrazamos y empezamos a besarnos, acariciarnos, al rato ya me estaba mamando, hasta que se puso boca abajo y me pidió que le coja la colita, me acomode tras de él, acerque mi verga dura y se la metí toda sin mayor problema, empecé un mete y saca rápido hasta que me acabe todo adentro de el por primera vez, se dio vuelta, nos abrazamos y seguimos besándonos, fue acariciando mis nalgas y metiendo su dedo en mi hoyito, yo me retorcía de placer y empecé a suspirar, me puso boca abajo y me empezó a chupar la cola, yo a suspirar moviendo mis caderas, subió besando mi espalda hasta el cuello, metió su lengua en mi oreja y me susurro al oído, la quieres sentir toda, yo entre suspiros casi gritando le dije, siiiiii métela todaaaaaa, puso su verga en mi hoyito y presiono, a medida que entraba el placer se transformó en dolor nuevamente, pero cuando estuvo toda adentro, solo sentí placer, el empezó a meter y sacar frenéticamente y en cada embestida, yo grita hay, hay, si, si, masssss, él me decía que calentito y apretadito esta ese culito, como te gusta sentirla toda, yo seguía gritando si, si dame más, métela toda, más fuerte, me gusta, si, si ...