La curiosidad complació al gato - Relatos Eróticos

La curiosidad complació al gato

... disfrutar pero que me dieron también mucho morbo, saber que estaba disfrutando mi culo aun antes de penetrarme.

Ya ambos sumamente excitados, le dije una vez mas que estaba listo. Entonces me puso boca abajo de nuevo y con sus manos me acarició las nalgas para luego abrirlas, noté que se excitó más al ver mi agujero virgen y de hecho no pudo evitar emitir un sonido "mmhhhh..." lo cual tomé como un cumplido. Luego acercó su cara a mi trasero y sentí su respiración, y así comencé a sentir su lengua tocando mis pliegues anales y estoy seguro que no pude evitar gemir ligeramente de placer (el rimming me lo han practicado mujeres y siempre me ha gustado). Así estuvo un rato hasta que acercó sus dedos a mi ano y luego metió uno de ellos, después dos que entraron con cierta facilidad, lo cual me sorprendió pero así pude comprobar que un buen culo siempre ha de ser lamido para que afloje. Cuando él se dio cuenta de los efectos de su lengua en mi agujero, ni tardo ni perezoso tomó un condón pero antes de que se lo pusiera, lo sorprendí con mi boca en su tronco nuevamente, mi intención era dejarlo bien mojado y listo para el condón. Así sucedió y cuando se lo puso, le pregunté en qué posición me quería y me contestó que primero quería en misionero, accedí sin preguntar. Me recosté boca arriba y él separó mis piernas, noté que dio un vistazo más a mi agujero y se acercó a lamerme los pezones y ahí lo tenía yo, encima mío esperando a ser desflorado. Él acercó su cabeza a mi hoyo y ...

... presionó ligeramente, nuevamente para mi sorpresa mi ano accedió con cierta facilidad. Al notar esto, él no vaciló y me la dejó ir de un empujón, mi cuerpo reaccionó con dolor pero con inmediato placer y estoy seguro que gemí desde ese momento. Le pedí que no se moviera, que le diera chance a mi ano de acostumbrarse un poco a su verga (no era muy grande, unos 13cm calculo yo). Cuando sentí que el dolor se reducía, le dije que podía moverse pero lento. Así lo hizo y entonces percibí que estaba muy atento a las reacciones de mi cuerpo, lo cual me hizo soltarme y aflojarme más, por lo que comencé a sentir placer muy pronto. él fue poco a poco incrementando el ritmo y cuando sintió mi ano más flojito, me volteó boca abajo (así es, esa posición le gusta) y me la metió de un golpe de nuevo, sentí delicioso. Ahí comenzó a comportarse como semental, dándome mas fuerte cada vez, mi cuerpo ya era suyo y ninguna parte de él oponía resistencia a sus embestidas. Ensayó varios ritmos, todos me gustaron. 

Luego decidí tomar yo algo de iniciativa y le dije que quería cabalgarlo, se dejó un rato pero quiso tomar el control de nuevo, así que siguió con piernas al hombro (uffff, descubrí que soy mas flexible de lo que pensaba jaja). A esa le siguió de ladito, luego yo de nuevo encima pero con las piernas abiertas dejando que sus ojos apreciaran cómo mi culo hacía desaparecer y aparecer su verga intermitentemente; luego misionero de nuevo para pasar al chivito en precipicio. Ahí note aun mayor ...